Nueva Delhi anuncia que está en condiciones de fabricar en serie un misil con carga nuclear
Los instrumentos para una carrera nuclear en Asia han sido puestos sobre la mesa. De nada han servido las condenas de las principales potencias tras las cinco pruebas nucleares efectuadas por India la semana pasada. Mientras el Gobierno paquistaní, el principal rival de Nueva Delhi, advirtió ayer que se disponía a efectuar su propio ensayo nuclear, India aseguró que ha puesto a punto un misil con carga atómica y que está lista para fabricarlo en serie.
India recalcó ayer que no sólo proseguirá de forma imperturbable su programa nuclear, sino que el nuevo misil que se dispone a fabricar tiene un alcance de 1.500 kilómetros. «No hay nadie que pueda obstaculizar hoy por hoy nuestro desarrollo tecnológico», declaró ayer A. P. J. Abdul Kalam, responsable del programa indio de misiles. «Las sanciones (aprobadas por Estados Unidos, Japón y Canadá) no tendrán efecto sobre este proyecto. Nuestro programa nuclear es cien por cien indio». Era la primera vez que India anunciaba oficialmente que había puesto a punto un misil capaz de portar una carga atómica y de fabricarlo en serie, el Agni (Fuego). Aunque el primer ministro indio, Atal Behari Vajpayee, aseguró ayer que su país no utilizará «jamás» sus armas nucleares como medio de «agresión», Pakistán mostró abiertamente su estado de ánimo. El ministro paquistaní de Asuntos Exteriores, Gohar Ayub Jan, reveló que su Gobierno había tomado ya la decisión de proceder a un ensayo nuclear en respuesta a las pruebas realizadas por Nueva Delhi. Un portavoz del ministerio de Ayub Jan indicó que los rumores de que Islamabad ya había realizado el experimento atómico eran «interesados». El primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif, precisó que su país estaba en condiciones de mostrar su potencial nuclear en un plazo de «entre 12 y 26 horas».El rumor desató un verdadero revuelo en la cumbre de los ocho países más desarrollados del mundo (G-8) que se celebraba en la ciudad británica de Birmingham. En el séquito presidencial de Bill Clinton se comparaba en tono jocoso la incompetencia de la CIA, que no informó de antemano de las explosiones indias, con la de los servicios secretos rusos, informan Ignacio Cembrero y Lourdes Gómez. ¿Y si se hubiese producido la prueba paquistaní?: «Redactaríamos un comunicado (de condena) en términos similares a los utilizados con India», afirmó el presidente francés, Jacques Chirac. El primer ministro británico, Tony Blair, expresó su temor de que, tarde o temprano, se acabará redactándolo, ya que las autoridades paquistaníes están sometidas a una «tremenda presión interna». Clinton puso en guardia a Pakistán e India para evitar lo que ya parece una imparable escalada nuclear en Asia.
Analistas militares y físicos nucleares mostraron el pasado fin de semana su certeza de que las recientes pruebas nucleares efectuadas por Nueva Delhi han hecho de India y Pakistán (donde viven mil millones de personas) una región mucho más peligrosa. Miembros destacados del Comité de Espionaje del Senado de Estados Unidos aseguraron ayer que estaban dispuestos a levantar las restricciones que pesaban para la venta de aviones de combate F-16 a Islamabad (cuyo programa atómico recibe apoyo chino) si no cumplía su amenaza de responder con pruebas nucleares propias a las realizadas por sus vecinos indios.
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