Los grupos parlamentarios dejarán la regularización de sus sueldos para después de las elecciones de octubre
Los grupos parlamentarios no quieren verse envueltos en una nueva polémica sobre una eventual subida de sus sueldos antes de las elecciones. El Estatuto del Político vasco, que regulaba las asignaciones salariales en la Cámara de Vitoria, no se retomará hasta que le próximo año se reanude la actividad parlamentaria con la nueva composición que salga de las elecciones. Según confirmaron ayer PSE-EE e IU, la regularización de los salarios será una de sus prioridades durante el próximo curso. Mientras tanto los diputados seguirán cobrando entre dos y tres millones sin tributar a Hacienda, al margen de su salario. Más de un año después de que la ponencia que desarrollaba el Estatuto del Político vasco quedara paralizada, ningún partido ha solicitado el reinicio de los trabajos. La fuerte polémica en la que se vieron envueltos los parlamentarios al hacerse público que estudiaban atribuirse pensiones vitalicias con tan sólo estar una legislatura en el escaño, bloqueó la ponencia y paralizó la regularización de sus salarios. En el Estatuto del Político, se incluía un apartado en el que los grupos parlamentarios estaban de acuerdo en dejar de percibir las dietas y gastos de locomoción -entre dos y tres millones de pesetas- como dinero que no tributaba a Hacienda, e incluirlo en el salario. La interpretación de que con esa medida los parlamentarios perseguían subirse los sueldos, en algunos casos hasta un 40%, acabó de complicar el futuro de ese documento.Los socialistas tienen la intención de retomar esos trabajos tras las elecciones, después de explicar a la ciudadanía que: "Vamos a seguir cobrando lo mismo, sólo que después del ajuste, el dinero va a tributar a Hacienda".Posición similar a la que mantiene el coordinador general de IU, Javier Madrazo. "Los salarios que cobramos son dignos, y no hay porqué subirlos".
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