José Luis Gómez estrena el primer montaje del año Brecht en España

José Luis Gómez vuelve a subirse a un escenario para interpretar uno de los personajes más divertidos y crueles de toda la dramaturgia de Bertolt Brecht, autor del que este año se celebra el centenario de su nacimiento. A partir del miércoles Gómez será el señorito borrachuzo de El señor Puntila y su criado Matti, una comedia social que tanto él como la directora Rosario Ruiz consideran un viaje, por la inteligencia. La puesta en escena se ha, hecho con el joven elenco estable del teatro de La Abadía, de Madrid, un centro que dirige Gómez desde hace tres años.

Gómez considera que el montaje que ahora estrena La Abadía no sólo es el primero de los grandes Brecht que este año se estrenarán en España con motivo del centenario, sino que supone la producción más significativa. Por segundo año consecutivo, Gómez vuelve a subirse al escenario de La Abadía como actor con otra persona en la dirección. Su anterior experiencia fue con Las sillas, de lonesco. Ahora con esta obra de Brecht, que dirige la colombiana Rosario Ruiz, cofundadora del teatro de La Abadía, coordinadora e impulsora de la actividad docente de este centro y primera mujer que dirige sobre un escenario a Gómez.Brecht tue elegiclo por directora y el actor porque, según ellos, este autor responde como ninguno al objetivo primordial del teatro de La Abadía: "Incidir con los métodos del discurso poético en la vida social", dice Gómez, quien considera que Brecht es el talento más grande de todos los tiempos. "Un talento puesto al servicio de los desfavorecidos, en contra de la guerra y los fascismos, sin permitirse a lo largo de su vida ni la más mínima trivialidad", añade el actor.

En El señor..., el áutor de Madre Coraje aborda las relaciones entre Puntila y Matti, personaje encarnado por Pedro Casablanca ,entre explotador y explotado:"Leyendo esta pieza, así como otras de este genio, se hace un viaje muy grande por la inteligencia", dice Gómez. Ruiz añade: "Es una leyenda eterna, la figura de Puntila existe en todos los países, en unos se llama hacendado, y en otros jefe; estamos ante una ágil y divertida comedia donde las peripecias de Matti, Puntila y los demás personajes se alternan con canciones, cuyas letras fueron escritas por él, haciendo así atrayente y sugestiva la carga de crítica social"