Di Pietro funda un partido para moralizar la política italiana
Moralizar a la clase política italiana y luchar por la celebración de un referéndum que ponga fin al sistema electoral proporcional son los dos grandes objetivos de Italia de los Valores, el movimiento político creado por el símbolo de Manos Limpias, Antonio Di Pietro. El ex magistrado, que alcanzó notoriedad a partir de 1992 cuando contribuyó a destapar el escándalo de corrupción política y económica conocido como Tangentopoli, dio vía libre ayer a esta nueva iniciativa política en Arezzo, en la región de la Toscana.Di Pietro, elegido el año pasado senador del Olivo, la coalición de centro -izquierda que gobierna el país, quiere ser el abanderado de un nuevo movimiento regenerador de la política italiana que no colisione con El Olivo. A las dos jornadas de fundación de la Italia de los Valores asistieron unas 300 personas, 18 de ellas parlamentarios del Olivo y el resto intelectuales como el director de la revista Micro Mega, Paolo Flores D'Arcais, y profesionales de todos los campos. Di Pietro fue elegido presidente de un movimiento que actuará en sintonía con el líder de los Demócratas de Izquierda, Massimo D'Alema. Contará con un equipo de 32 coordinadores (16 parlamentarios y 16 representantes de la sociedad civil) que elegirán por turnos rotatorios al portavoz del grupo.
El nacimiento del partido quedó sellado con la aprobación de un manifiesto de principios que no fue firmado por todos los asistentes al seminario de 48 horas en el que se gestó definitivamente la Italia de los Valores.
Desde que fue elegido el pasado otoño senador del Olivo, el ex magistrado manifestó su intención de crear "un movimiento transversal" en el que además de políticos, no necesariamente incluidos en la mayoría de gobierno, tuvieran cabida ciudadanos alejados de la política activa.
En sus intervenciones del fin de semana, Di Pietro dejó claro que no piensa encarnar el "partido de los magistrados" -"aunque la cuestión de la justicia es lo que nos ha reunido aquí", señaló-, sino que su acción política se centrará en la batalla por un referéndum para reformar la ley electoral. El objetivo es que desaparezcan de la escena política los más de cuarenta partidos minoritarios que, con un sistema mayoritario de doble vuelta, verían gravemente dificultado su camino al Parlamento.
Di Pietro y sus seguidores necesitan medio millón de firmas para conseguir tal referéndum.
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