Publicada la primera historia de los directores artísticos del cine español

El arquitecto e historiador cinematográfico Jorge Gorostiza, de 41 años, acaba de publicar la primera historia de la escenografía en el cine español, con los testimonios de sus creadores. Directores artísticos del cine español ha sido editada por Cátedra y Filmoteca Española. El estudio coincido con otro ensayo de Gorostiza, La imagen supuesta (Caja de Arquitectos de Barcelona), sobre la presencia de los arquitectos en el cine. El libro analiza los filmes basados en arquitectos reales y aquellas películas -llega a contabilizar 375- en donde aparecen personajes que son arquitectos o aspectos de la arquitectura.

La historia de la escenografía cinematográfica española arranca en el cine mudo y llega a las generaciones de la televisión, con el paso de los carpinteros a los escenógrafos teatrales. El último Goya en esta especialidad se entregó a Félix Murcia, por Secretos del corazón.

"Un hito en esta historia es la aparición de los techos en las películas, a partir de Nada, de Neville", declara Gorostiza. "El espacio escenográfico tiene sus propias reglas y se diferencia del espacio arquitectónico. En el libro se pueden ver bocetos y planos de directores artísticos que se pueden contrastar con las imágenes de las cintas. El arquitecto es la única profesión que está vinculada a un edificio, y el director artístico se une al estudio, y cuando éstos desaparecen, siguen en otros escenarios para transformar la realidad".

El libro incluye entrevistas con directores artísticos, como Alfonso de Lucas, Ramiro Gómez, Gil Parrondo -ganador de dos oscars-, José Luis Galicia y Luis Vázquez. También se ofrecen documentos y escritos y la filmografía de todos los directores artísticos. "Los españoles han sido de los mejores del mundo", afirma Gorostiza. "Las grandes producciones extranjeras, como Cleopatra o Lawrence de Arabia, vienen a España por la mano de obra barata, pero sobre todo por los magníficos constructores de decorados, con una escuela de grandes estudios, como Cifesa y Bronston". Los profesionales suelen decir que "el mejor decorado es el que no se nota", pero Gorostiza defiende el aspecto artístico de "los creadores de espacios".