El obispo Blázquez justifica su consulta sobre funerales de víctimas de ETA
El obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, intentó ayer sacudirse las críticas originadas por la recomendación que le hizo el Consejo Presbiteral de que no oficie los funerales por las víctimas de ETA con una nota en la que condena inequívocamente la violencia. Blázquez asegura que cuantos conocen la situación "complicada y conflictiva del País Vasco pueden comprender que el obispo consulte a sus sacerdotes a fin de colaborar del mejor modo posible a la erradicación de la violencia y la pacificación".
La decisión de Blázquez de presidir los funerales por el concejal de Ermua Miguel Ángel Blanco y del ertzaina José María Agirre, desmarcándose de sus antecesores, fue criticada por parte del clero vizcaino, por lo el obispo consultó al Consejo Presbiteral.
Blázquez no hace ninguna referencia directa a los funerales pero subraya que quiere "colaborar del mejor modo posible en la extirpación total y radical de esta violencia".
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