Un hombre, condenado a sólo 240.000 pesetas de multa por apuñalar a su esposa

Dos sentencias de la Audiencia de Barcelona han impuesto penas leves en dos casos distintos de agresiones a mujeres en manos de sus respectivos maridos. Una de las víctimas fue apuñalada, acción que ha sido sancionada sólo con el pago de una multa de 240.000 pesetas. El segundo caso es una agresión sexual que el tribunal ha condenado al acusado a ocho meses de prisión al apreciar que el hombre actuó bajo los efectos del alcohol. Las dos sentencias son del mismo tribunal, la Sección Novena, y en uno y otro caso los fiscales rebajaron su petición inicial, que era más elevada, porque los acusados reconocieron los hechos.

El primero de los casos corresponde a la pena impuesta a Jesús Díez Arranz, condenado al pago de una multa de 240.000 pesetas por asestar dos puñaladas en el abdomen a su esposa. Los hechos ocurrieron en noviembre de 1995 en un establecimiento público de I'Hospitalet donde el acusado amenazó a su mujer de muerte. La sentencia relata que el agresor advirtió a su mujer que "no regresara a casa porque le pincharía". Eso fue precisamente lo que ocurrió cuando la víctima llegó al domicilio conyugal. La mujer salió huyendo hacia la calle perseguida por su marido. El acusado la alcanzó en un supermercado y le asestó dos cuchilladas que requirieron asistencia médica diez días.Inicialmente, el acusado se enfrentaba a una petición de tres años de cárcel y siete meses que fue rebajada por el fiscal en el acto del juicio al pago de ocho meses de multa a mil pesetas diarias. Con la modificación, el fiscal calificó lo ocurrido como un delito de lesiones menos graves que conlleva penas de multa o arresto sustitutorio.

La segunda de las condenas corresponde a C.A.G. por agredir sexualmente a su esposa por negarse a mantener relaciones con él. La pena impuesta es de ocho meses de prisión al aplicar el tribunal al acusado dos atenuantes: que estaba bebido y que reconoció los hechos al inicio del juicio. La agresión se produjo el cinco de noviembre de 1996 en el domicilio de la pareja en l'Hospitalet cuando ella se negó a mantener relaciones sexuales. Según la sentencia, el acusado se abalanzó sobre su esposa, la desnudó violentamente y para acallar sus gritos le puso una compresa en la boca y la penetró vaginalmente con los dedos.

Agentes de la Guardia Civil detuvieron ayer al joven Julio José Sánchez, de 22 años de edad, acusado de haber violado a su esposa en una ocasión y de intentarlo de nuevo en la madrugada de ayer en su domicilio de la población de Banyeres del Penedés (Tarragona). Esta es la tercera detención en una semana que se produce en la provincia de Tarragona por agresiones sexuales o físicas contra mujeres, informa Josep Garriga.

Un hombre de 60 años, R. M. R., mientras, quedó ayer en libertad provisional por decisión del juzgado de guardia de Zamora tras ser acusado de amenazar de muerte a su esposa, informa José Lera. El presunto agresor ha pasado dos días detenido en la comisaría de Policía Nacional, antes de ser puesto a disposición judicial. Según consta en la denuncia, el marido amenazó a su esposa con un cuchillo y le anunció que le iba a quemar la casa. La mujer había denunciado agresiones en dos ocasiones anteriores.

En Pamplona, mientras, la Policía Municipal detuvo el pasado día 1 a W. C. instantes después de que éste reconociera haber agredido a su antigua compañera sentimental, a quien, bajo evidentes síntomas de embriaguez, golpeaba en plena calle, informa Mikel Muez. Una llamada telefónica alertó a una dotación policial. Al llegar al lugar, los policías hallaron al presunto agresor junto a una mujer, M. I. A. G., de 31 años, que denunció a los agentes que acababa de ser golpeada por el hombre. Éste seguía profiriendo continuas amenazas contra la mujer, quien fue trasladada hasta un centro sanitario para ser atendida de lesiones leves.

-El ministro de Trabajo y Asuntos Sociales se comprometió ayer a aprobar, en los consejos de ministros de este mes, "un plan concreto de lucha contra los malos tratos" a las mujeres.