La tercera delegación más importante para Bogotá

, En términos de importancia la Embajada de Colombia en España ocupa un tercer lugar. Sólo la representación diplomática en Washington y la de Caracas, en la vecina Venezuela, se consideran, por diferentes motivos, con mayor peso.España es para Colombia la puerta de entrada al viejo mundo y al mercado europeo. En otro nivel no es exagerado decir que es una de las embajadas más peleadas, pues funciona como excelente plataforma política. Muchos creen que junto a la Embajada en Washington la de Madrid puede ser la antesala a la presidencia. Por allí han pasado el ex presidente Belisarlo Betancur y la actual ministra de Relaciones Exteriores, María Emma Mejía. Fue el paso anterior dado por el presidente Ernesto, Samper y el lugar donde estuvo cumpliendo con una doble labor el ex vicepresidente Humberto de la Calle. Este último renunció para dejar clara su protesta por la corrupción del actual Gobierno envuelto en un interminable narcoescándalo.

''¿Quién no ha querido estar en España alguna vez?", dijo a Radio Net Guillermo Alberto González cuando se hablaba ya de su nombramiento como embajador en España. Y éste es un sentimiento generalizado, "estar en España, es estar en el extranjero sin salir de Colombia", es un decir general. Las relaciones económicas son cada vez más estrechas entre Colombia y España. En 1996 España subió al segundo lugar como socio comercial de este país suramericano después de EE UU. La inversión, sobre todo en el sector financiero, fue la razón. En 1997 esta tendencia se mantuvo. En septiembre pasado un consorcio liderado por Endesa hizo una gigantesca inversión en la empresa de energía de Bogotá de más de 2.000 millones de dólares (casi 300.000 millones de pesetas).

Recientemente la ministra de Relaciones Exteriores aseguró que la prioridad número uno para este 1998 será trabajar en el campo de los derechos humanos, para mostrar a la comunidad internacional la realidad sobre este tema. La UE es fundamental para esta campaña. Otra prioridad será buscar el apoyo internacional para lograr la paz. España es uno de los llamados "países arnigos", que podrían servir de intermediarios para poner fin a la guerra que desangra a Colombia.