Netanyahu y Arafat, unidos por sus respectivas crisis de Gobierno

Yasir Arafat y Benjamín Netanyahu finalizan el año político de idéntica manera: sumidos en una grave crisis interna. Netanyahu se despide de 1997 con un doloroso debate parlamentario en el que trata de que se apruebe, contra viento y marea, la ley de presupuestos para el próximo ejercicio. La despedida de Arafat no es menos difícil enfrentado a un sucedáneo de "moción de censura" para que remodele el Ejecutivo y recorte sus poderes presidenciales.El primer ministro israelí salió el lunes derrotado por segunda vez de un debate parlamentario en el que había presentado la ley de presupuestos para 1998. Ayer, Netanyahu, en un intento de asegurarse la fidelidad de los partidos de la extrema derecha y ortodoxos en la próxima votación del presupuesto, efectuó importantes concesiones económicas a los colonos, a quienes prometió subvenciones para cinco asentamientos de Cisjordania y Gaza, la construcción de un instituto religioso y de una carretera directa a la tumba de Raquel, en Belén, así como el reconocimiento del Canal 7, la radio pirata de los colonos.

El líder palestino, por su parte, se enfrentó ayer a su Parlamento, que le dio un ultimátum de tres meses para reorganizar su Gabinete y sacar adelante las reformas que se le exigen, o someterle si no a una moción de censura.