La última matanza islámista se cobra 27 víctímas en un pequeño pueblo argelino

Al menos 27 personas de tres familias -entre ellas varias mujeres y un bebé de pocos días- fueron degolladas y mutiladas en la madrugada del pasado viernes en un pueblecito a 200 kilómetros al suroeste de Argel, según informaban ayer varios diarios independientes argelinos. La locura asesina, que un año más se ha intensificado en vísperas del mes del Ramadán, ha causado en Argelia -según estimaciones occidentales- 60.000 muertes desde que en 1992 se anularan las elecciones ganadas por los integristas. Amnistía Internacional pide una comisión investigadora exterior.

La última matanza conocida se produjo en la pequeña localidad de Zuabria, en la región de Tiaret, y entre las víctimas había un recién nacido degollado sobre las rodillas de su madre. La mujer fue mutilada con un hacha. Hace sólo tres días, en otros dos pueblos cercanos de esa región, fueron asesinados 48 civiles, según datos de la policía argelina. La prensa sitúa esa cifra entre 81 y 120 muertos.El pasado jueves por la tarde tres patriotas (miembros de grupos de autodefensa) murieron por la explosión de una bomba en Sidi Ali, cerca de Larbaa, también al sureste del país. Los tres hombres inspeccionaban un colegio cuando la bomba, colocada en el despacho del director, hizo explosión, según indican los rotativos argelinos. El día anterior, el jefe de la Segunda Región Militar (Orán, en el Oeste), el general Kamel Abderrahmán, invitó a los habitantes a que se armen o se instalen en la ciudad.

La prensa de ayer indicaba también que las fuerzas de seguridad han iniciado operaciones contra los guerrilleros islamistas, unos días antes del mes de ayuno del Ramadán, en el que los grupos armados acostumbran a intensificar sus ataques. El Ramadán está considerado por los grupos armados islamistas como "propicio para la yihad" (guerra santa) por su carácter simbólico de sacrificio y de privación, y como homenaje a las batallas llevadas a cabo y ganadas por el profeta del islam, Mahoma. Todos los atentados y matanzas, incluidos los de la semana pasada que causaron más de 120 muertos, se atribuyen al más radical de los grupos armados argelinos, el Grupo Islámico Armado (GIA), que rechaza cualquier tregua y diálogo con el poder argelino.