Se entrega en Paraguay el general golpista huido de la justicia
Tras permanecer seis semanas escondido, el ex jefe del Ejército paraguayo Lino César Oviedo se entregó ayer a una unidad militar en Asunción para cumplir un arresto disciplinario de 30 días, ordenado por el presidente, Juan Carlos Wasmosy. El presidente pidió el pasado 3 de octubre el arresto de Oviedo al considerar que el ex militar, acusado de intento de golpe de Estado en 1996, había hecho declaraciones "agraviantes" a la dignidad presidencial.Antes de entregarse, Oviedo, proclamado en septiembre candidato presidencial electo del gubernamental Partido Colorado para los comicios del 10 de mayo de 1998, pronunció un discurso ante varios centenares de seguidores desde el techo de una camioneta. Sin embargo, la policía lo interrumpió para trasladarlo, en medio de un gran tumulto, al interior de la Primera División de Infantería, donde debe cumplir el arresto. Antes, Oviedo dijo: "Esto acontece porque aún tenemos resabios del pasado, que están dando sus últimos suspiros".
Oviedo pasó a la clandestinidad tras el asalto del 30 de octubre a su residencia por tropas de la Guardia Presidencial que le buscaban para que cumpliera el arresto.
