La Pólitécnica saca a la luz los recuerdos de los niños de la guerra

Es una exposición ante todo histórica, pero también henchida de nostalgia. Hasta el próximo 5 de diciembre, el campus sur de la Universidad Politécnica alberga una colección, El exilio español en la guerra civil, en la que se sigue la pista de los niños de la guerra, los hijos de combatientes republicanos que hubieron de emprender el amargo camino del exilio al final de la contienda.

En la sala se ha reunido un muy variado muestrario de fotografías, carteles, dibujos, revistas o postales de ese trágico periodo, que la Fundación Largo Caballero se ha encargado de recopilar a lo largo de los últimos años. Quizá lo más entrañable de, todo lo expuesto sea la colección de objetos infantiles y material escolar que se exhibe en las vitrinas.

En la parte documental, unos paneles cronológicos recogen varios listados de aquellos chiquillos que marcharon, desolados, con rumbo a tierras lejanas y la sola compañía de maestros y médicos. Entre las fichas de los pequeños exiliados pueden descubrirse algunos nombres que, con el tiempo, serían relevantes en el país: el ex secretario general de la UGT Nicolás Redondo, por ejemplo, que figura entre los exiliados desde Bilbao.