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La reforma del curso que permite al licenciado ser profesor se mantiene paralizada

50.000 titulados realizan cada año los estudios de adaptación pedagógica

La reforma del curso pedagógico que permite a los licenciados acceder a la docencia en centros públicos de educación secundaria apenas se ha puesto en marcha de forma experimental en media decena de universidades, a pesar de que fue aprobada hace dos años por el Ministerio de Educación. Alrededor de 50.000 licenciados realizan cada año el obsoleto curso de adaptación pedagógica (CAP), necesario para presentarse a las oposiciones de profesor de educación secundaria obligatoria (ESO), bachillerato y formación profesional. Hoy por hoy, es considerado por profesionales y estudiantes como "un mero trámite" sin apenas valor formativo.La reforma del antiguo CAP para convertirlo en el nuevo curso de cualificación pedagógica (CCP) debía haberse puesto en marcha de forma experimental el pasado curso, pero los actuales responsables del Ministerio de Educación, que ya mostraron su descontento al inicio de la legislatura con esta reforma, promovida por el PSOE, aún no han expresado ninguna posición oficial sobre el asunto. Los problemas a los que se enfrentan las comunidades con esta reforma son: falta de presupuesto para financiar el nuevo curso, necesidad de muchos más profesores de secundaria para impartir la parte práctica y una demanda inabarcable de alumnos.

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Una alternativa

Las comunidades con plenas competencias educativas están a la espera de una respuesta de la Administración central, tanto para concretar su reorganización como para saber con qué apoyo presupuestario contarán, ya que en el territorio MEC (10 comunidades) sólo se ha realizado la reforma en la Universidad de Alcalá de Henares, cuyos resultados aún no se han analizado, y las transferencias a las comunidades se hicieron antes de aprobarse la reforma. También hay un curso experimental en la Autónoma de Madrid, pero es diferente al CCP y anterior al real decreto.El. CAP desaparecerá en el año 2000. Los que se han lanzado al cambio, como la Universidad de La Laguna, la Autónoma de Madrid, la de Alcalá de Henares o la Autónoma de Barcelona, dicen que el tiempo apremia y que en sólo un par de cursos es imposible hacer la modificación en condiciones.

Cuando se organizó la reforma de la educación secundaria con la LOGSE, cuya implantación plena estaba prevista para el año 2000, se hizo hincapié en la necesidad de preparar mejor a los futuros profesores de secundaria. Por esta razón, el nuevo CCP se organizó como una especie de master de un año de duración que garantizara que los licenciados se presentaran a las oposiciones bien capacitados para enseñar.

El precio oficial del CAP es de 22.000 pesetas y su duración está fijada teóricamente en 300 horas. Pero, aunque el precio sí se ha mantenido, las horas que se imparten desde hace años oscilan entre las 40 y las 100 y se dan a lo largo de unos tres meses. Nada que ver con el plan inicial. La solución a los problemas no está nada clara con la reforma, con la que el número de horas oficiales es de entre 600 y 750, el curso debe durar un año y será más caro.

6.000 frente a 120

La elevada demanda es una importante pega cuya única solución exige establecer una oferta limitada. A título de ejemplo, en la Comunidad de Madrid conviven la reforma experimental en la Universidad Autónoma y el CAP tradicional en la Complutense. El modelo de la Autónoma es ejemplar, aunque aún no está plenamente adaptado a la regulación, pero sólo lo hacen unos 120 alumnos al año, mientras que el de la Complutense lo hacen cada año cerca de 6.000 licenciados.La normativa sobre esta cuestión señala que todas las administraciones debían asegurar "el inicio de la impartición del CCP en el curso 1996-1997", así como que estas enseñanzas deben estar implantadas "con carácter general a partir del curso 1999-2000".

En cuanto al precio del nuevo curso, se calcula que los alumnos tendrán que abonar unas 300.000 pesetas, si deben pagar el coste por horas, y las pruebas de selección serán imprescindibles", explica Neus San Martí, coordinadora del Instituto de Ciencias de la Educación (ICE) de la Universidad Autónoma de Barcelona.

El decano del Centro Superior de Educación de la Universidad de La Laguna, Javier Marrero, señala: "El curso puede incluir materias de las oposiciones y ofrecer asignaturas como materias de libre configuración en las carreras para después convalidarlas a los alumnos que quieran realizar este curso". Pero el caso de La Laguna es pecualiar: admite a todos los licenciados que quieran hacer el CCP (aunque sólo lo solicitan unos 140), ofrece ya todas las especialidades, imparte 670 horas y cobra 83.000 pesetas a los alumnos.

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