Nuevos documentos prueban que la policía francesa mató al menos a 90 argelinos en 1961
Un primer vistazo a los archivos de la Fiscalía de París sellados hace 36 años ha permitido conocer que al menos 90 manifestantes franco-argelinos murieron en las calles de la capital francesa en octubre de 1961, víctimas de la represión policial. Al contacto con la luz en esta Francia dispuesta a expurgar su pasado, la versión gubernamental de la época que estableció unsaldo de dos muertos ha quedado definitivamente pulverizada, mostrando descarnadamente la falacia de determinadas versiones oficiales y la desfachatez con que el poder trata en ocasiones a sus víctimas.
El listado de personas de nombres y apellidos magrebíes fallecidos por "homicidio involuntario" en las calles de París está registrado con las letras "X FMA", correspondientes a los cadáveres "no identificados de un francés musulmán de Argelia" y aparece sistemáticamente acompañado de la expresión "non lieu" (no ha lugar), prueba de la decisión de la Fiscalía de archivar el caso, que se produjo en tiempos de Charles De Gaulle.El profesor de Historia David Assouline descubrió el listado el pasado lunes cuando, interpretando literalmente el compromiso público adquirido por la ministra de Cultura y de Comunicación, Catherine Trautmann, acudió a los archivos de la Fiscalía y pidió inspeccionar los informes elaborados a partir de aquel fatídico 17 de octubre de 1961.
Para su sorpresa, el responsable de esa documentación declarada secreta e inexpugnable hasta el año 2061 atendió su petición con la mayor naturalidad y tras invocar la voluntad del Ejecutivo puso el archivo a disposición del historiador. Este gesto ha motivado la apertura de una investigación por el director de los archivos con el argumento de que no existe una derogación general del secreto, sino derogaciones individuales.
La relación de víctimas fue registrada en el archivo de la Fiscalía entre el 17 de octubre de 1961 y el último día de ese mismo mes, dato que, a falta de una información más completa, se explica por el hecho, asentado por los investigadores contemporáneos, de que buen número de manifestantes fueron arrojados a las aguas del Sena tras ser inmovilizados por la policía.
Testimonios recogidos por una serie de historiadores indican que algunos cadáveres aparecieron en fechas posteriores al 17 de octubre de 1961 y en lugares distantes de la capital francesa. En todo caso, dadas las circunstancias, la cifra de 200 muertos y desaparecidos establecida por algunos historiadores no podrá ser completamente acreditada, aunque quedan ahora por desvelar los archivos ministeriales, los del Instituto Médico Legal y el de Pompas Fúnebres, entre otros. La represión de la manifestación convocada por el Frente de Liberación Nacional (FLN) argelino en protesta por el toque de queda impuesto a la comunidad argelina de París fue un hecho premeditado y criminal, de acuerdo con el testimonio de uno de los policías participantes en los hechos aportado recientemente por el diario Libération. Según este testimonio, el entonces prefecto de Policía de París, Papon, el mismo que ocupa estos días el banquillo de los acusados en Burdeos por haber ordenado presuntamente la deportación de 1.600 judíos a los campos nazis durante el régimen de Vichy, arengó a sus hombres: "Disparad los primeros, seréis respaldados".
Papon habría diseñado la represión de los 20.000 argelinos que se disponían a desfilar por París con consignas favorables a la independencia de Argelia y a favor del FLN como si se tratara de una operación de guerra. Según el antiguo policía, el bulo de que los manifestantes habían matado a un policía, extendido entre los policías de manera seguramente interesada, desató la carnicería de aquella noche terrible, en la que los agentes dispararon a mansalva contra la multitud y 11.000 de ellos fueron detenidos y trasladados al Palacio de los Deportes y al Estadio Pierre de Coubertin.
Aquellos hechos están aflorando inevitablemente en el proceso por "colaboración con crímenes contra la humanidad"' que se sigue en Burdeos contra Maurice Papon. El que fue secretario de la Prefectura de la Gironda durante la ocupación alemana, posterior prefecto de París en 1961 y luego ministro del Presupuesto ha afirmado que la violencia fue producto del enfrentamiento entre facciones rivales argelinas. En otras ocasiones, Papon ha expuesto que aquello fue clave porque, según él, marcó el declive definitivo del FLN en Francia y truncó la perspectiva de que la lucha por la independencia se reprodujera en territorio francés.
