Los sondeos anticipan en Argentina la primera derrota peronista en una década
La prensa argentina conspira, golpista, contra el Gobierno. El ministro de Economía, Roque Fernández, no encuentra otra explicación a las desfavorables previsiones demoscópicas de los candidatos oficialistas en las legislativas del domingo. "Los grandes logros de este Gobierno han sido neutralizados como por una especie de golpe mediático", acusó Fernández. La Alianza, platafórm opositora constituida por la Unión Cívica Radical (UCR, socialdemócrata) y el centroizquierdista Frepaso (Frente del País Solidario), ganan posiciones, y el Partido Justicialista (PJ, peronista conservador) puede sufrir su primera derrota electoral en casi una década. Aun así, la composición de la Cámara de Diputados registrará pocos cambios, y el justicialismo quedaría como primera minoría porque la consulta renueva parcialmente la cámara.
El tremendista cargo del ministro es compartido por muchos funcionarios y militantes justicialistas, para quienes la prensa debiera reflejar, un día sí y otro también, los evidente éxitos macroeconómicos del primer mandato de la Administración de Carlos Menem, período en el que quedó apuntalada la estabilidad política y económica al derrotarse la hiperinflación heredada del gobierno radical (1983-89) mediante la fijación de la paridad entre el peso y el dólar, la privatización de empresas del Estado, y la captación de multimillonarias inversiones, Pero de esos logros se habló y escribió con generosidad desde el año 90, y es lección aprendida para el electorado y la mayoría de la prensa. En el centro del debate, se instaló el debilitamiento de la clase media, castigada por el aumento del paro, la debilidad institucional en la lucha contra la corrupción y los consiguientes escándalos, y las carencias oficiales en la atención de problemas sociales como la educación, o la sanidad.
Críticas de Cavallo
Rebatió a Fernández el candidato a diputado por un partido de nueva creación, y anterior ministro de Economía, Domingo Cavallo, que fue destituido por Menerri cuando sus denuncias sobre la existencia de "mafias enquistadas en el poder" hicieron imposible la convivencia en el Gabinete. "El ministro habla de un golpe mediático porque en un país normal el oficialismo ganaría por 60 contra 40. Qué equivocado está", declaró ayer. "En un país normal, a un Gobierno como el de Menem la gente no lo votaría después de haber defraudado a la opinión pública, que le dio el 51% de los votos, y de no haber utilizado ese respaldo popular para profundizar , en las reformas".En las elecciones legislativas del día 26 se renuevan casi 11.000 cargos nacionales, provinciales y municipales. Interpretada como indicativa de lo que puede ocurrir en las presidenciales de 1999, interesa lo que ocurra en la votación de 127 nuevos diputados, la mitad de la Cámara. El Partido Justicialista cuenta con 131 representantes y quorum propio. La UCR, 68, el Frepaso, 24 y completan los 34 escaños restantes partidos provinciales o unipersonales, consecuencia de escisiones. La UCR y el Frepaso concurren juntos en la mayoría de las provincias después de haber llegado a la conclusión de que por separado las expectativas no eran buenas.
