Una decisión polémica en un año austero

El Gobierno quiere subir sensiblemente los sueldos de sus altos cargos para evitar su fuga a la iniciativa privada, pero tiene dificultades para llevar adelante la medida, sobre todo en unos años en los que predica la austeridad para cumplir con sus compromisos de reducción del déficit. El subsecretario de Economía y Hacienda, Fernando Díez Moreno, dijo el lunes a este diario que los secretarios de Estado no cobrarán por encima del 2,1%, la subida salarial de los funcionarios para 1998. José Folgado, secretario de Estado de Presupuestos, defendió, incluso, que los sueldos de los empleados de las empresas públicas con pérdidas no llegaran a ese 2,1%.Sin embargo, ayer, el ministro Rato dejó la puerta abierta a una subida superior al 2,1 % y no negó la denuncia de un alza del 30% que le hizo el PSOE. Los sindicatos han reaccionado con dureza.