Rockera con carácter
Hasta dos horas llegó a retrasarse esta joven rockera neoyorquina, para desesperación de la larga fila de espectadores ansiosos por oír en directo Bitch, canción que ha abierto las puertas de todos los mercados a Meredith Brooks. Menos mal que la piba supo sobreponerse a su propia soberbia -por la tarde había amenazado con no conceder entrevistas hasta que no le sirvieran una lubina. ¿Habrá Telelubina en Nueva York?- y pidió perdón al público por la tardanza, pero -genio y figura- no quiso regalar ni un solo bis.En cuanto a la actuación musical en sí, Brooks exhibió todo un carácter de rockera capaz de hacer sus propios solos a la guitarra y que sin duda contrasta con otras propuestas musicales de índole más meliflua. Sus temas, construidos alrededor del grueso sonido de hasta tres guitarras tañidas a un mismo tiempo, tienen fuerza y ambientación inequívocamente urbana.
Meredith Brooks
Meredith Brooks (voz y guitarra), Josh Freese (batería), Paul Bushnell (bajo) y David Ricketts (teclados). Sala Caracol. Madrid, lunes 29 de septiembre.
Reconocimiento
Aunque es de ley reconocer que aún hay bastante distancia entre el mentado sencillo de éxito y el resto de su repertorio -Stop, I need o It don't get better-, siendo Bitch su fuente de reconocimiento masivo y el resto de los temas todavía huérfanos de estribillos felices y sólidos riffs de guitarra -la sal del rock-Apelando a su entrega escénica, Meredith se apuntó su primer triunfo escénico en España. El primero porque, a juzgar por la encendida reacción de la audiencia, esta intérprete dará mucho que hablar. Eso sí, el espíritu de otras excelsas damas del rock -Joan Jett o Patti Smith- no siembra de nubes su esperanzador camino.
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