_
_
_
_

Los países árabes e Israel ven signos e apertura en Irán

Mientras los gobiernos de Oriente Próximo analizan al nuevo presidente de Irán, Mohamed Jatamí, crecen los signos de que la tradicional hostilidad entre los países árabes y el régimen revolucionario islámico de Teherán se está empezando a derretir.

Desde la victoria de Jatamí el pasado mes de mayo, decepcionante para los extremistas religiosos, los líderes árabes se han animado al ver que ha designado a varios destacados moderados al frente de algunos ministerios, que ha conseguido con éxito la aprobación de esos nombramientos en el ultraconservador Parlamento iraní y que hay una serie de halagüeñas declaraciones de política exterior por parte de un Gobierno teocrático que durante mucho tiempo ha sido contemplado como el mayor exportador de extremismo islámico de la región.

Algunos signos de acercamiento son la reanudación de los vuelos de Irán Air entre Arabia Saudí e Irán; la reciente decisión de Irak de abrir su frontera a los peregrinos iraníes que viajan a la Meca y el compromiso de los gobiernos árabes de asistir a una conferencia de países islámicos en Teherán en diciembre.

Incluso en Israel, donde los altos funcionarios continúan siendo profundamente escépticos con respecto a Irán, los periódicos han destacado recientemente algunos contactos no oficiales entre los dos Gobiernos para resolver disputas comercial ' es que arrastran desde, la revolución, en 1979. -

"Creo que ha habido un cambio significativo en Irán", dice David Menashri, profesor de estudios de Oriente Próximo en la Universidad de Tel Aviv y experto en política iraní. "No es sólo el nuevo Gobierno. Es la nueva atmósfera que se respira en Irán, las expectativas crecientes de cambio, y creo que el equipo es capaz, en términos de ideología, de adaptar políticas más pragmáticas".

Desde que en 1979 los clérigos musulmanes shiíes derrocaran al Sha Mohamed Reza Pahlevi, los países árabes acusan a Teherán de. tratar de exportar su revolución a través del apoyo a grupos islámicos como Hezbolá (Partido de Dios), cuya ala militar ha sido relacionada con actividades terroristas en todo el mundo y que es la principal fuerza shí musulmana que lucha contra tropas israelíes en el sur de Líbano.

Si Occidente y algunos de sus aliados regionales continúan reticentes y no dan rápidos pasos para abrazar al nuevo Gobierno iraní es en gran parte por su experiencia con el predecesor de Jatamí, Hashemi Rafsanyani, que dejó su cargo el mes pasado después de dos mandatos de cuatro años. Aunque durante mucho tiempo fue considerado como un moderado, Rafsanyani no pudo escaparse de la sospecha de haber sancionado los actos terroristas.'

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_