El Gobierno destinará los ingresos fiscales que superen las previsiones a reducir déficit

ENVIADA ESPECIAL Los ingresos fiscales que superen las previsiones que figuran en los Presupuestos Generales para 1998 se destinarán a reducir el déficit público y en ningún caso a aumentar los gastos del Estado, según recoge una disposición que se incluirá en el citado proyecto. El Banco de España espera que el Ejecutivo cumpla este compromiso para evitar que la economía española, en plena fase expansiva, recaliente su crecimiento en la recta final hacia la entrada en funcionamiento de la unión monetaria, el 1 de enero de 1999, según explicaron representantes de esta institución ayer en Hong Kong, donde se celebra la asamblea anual del FMI y el Banco Mundial.

La autoridad monetaria está preocupada con el notable incremento de la demanda de crédito en los últimos cuatro meses. La fuerte aunque dosificada rebaja del precio oficial del dinero registrada en España desde que en marzo de 1995 el. PP ganó las elecciones -tres puntos porcentuales, hasta el 5,25% actual- ha tardado en tener impacto en el consumo, pero desde el inicio del verano varios indicadores apuntan a que la expansión está produciéndose a un ritmo mayor del esperado.De ahí que el banco central confíe en que el Ejecutivo, que está a punto de presentar los Presupuestos al Parlamento, mantenga e incluso intensifique sus esfuerzos de austeridad. Según las citadas fuentes, el Ministerio de Economía se ha comprometido a incluir una disposición en el proyecto de presupuestos que le obliga a destinar a la reducción del déficit todos los ingresos fiscales que se sitúen por encima de la previsión oficial.

Una inicitiva similar tomó el PSOE en la elaboración de los últimos Presupuestos de su legislatura, es decir, de los correspondientes a 1096, que luego prorrogaría el. Gobierno conservador.

Consolidación fiscal

La medida persigue intensificar la consolidación fiscal y evitar que la actividad económica, en una intensa fase expansiva, se vea además estimulada por la vía prespuestaria. Así, aunque un aumento en el gasto que estuviera finanaciado sólo con los ingresos de más no pondría en peligro el cumplimiento del objetivo de déficit -2,4% del producto interior bruto (PIB) para 1998-, el objetivo es controlar al máximo por la vía fiscal el ritmo de la actividad económica y, en consecuencia, la inflación.

Sobre todo, teniendo en cuenta que el margen de maniobra de la política monetaria para controlar cualquier repunte de los precios es muy limitado dado que los tipos de interés a corto plazo en España deben converger con los de los países más estables de la futura unión monetaria, de la que, todo indica formará parte España (en la actualidad, el tipo de interés oficial en Alemania está en el 3%).

El vicepresidente segundo y ministro de Economía y Hacienda, Rodrigo Rato, que ayer intervino en la reunión del comité interino del FMI, el órgano ejecutivo de la institución, aseguró en una conferencia de prensa posterior que el ajuste en España seguirá recayendo en la política prespuestaria y recordó que el Gobierno ya ha anunciado que este ejercicio reducirá en una décima más de lo previsto el déficit del Estado (excluidas las administarciones territoriales y la Seguridad Social).

El ministro no quiso pronunciarse sobre la posibilidad de aplicar a las gestoras de fondos de inversión un impuesto del 0,15% sobre el volumen de los patrimonios que mueven (24,8 billones de pesetas). Esta medida, que fuentes del Ministerio han confirmado está en estudio, ha provocado el rechazo de la asociación que agrupa a los gestores de fondos, Inverco, y de la banca, según dejaron ver ayer algunos de los banqueros españoles asistentes a las reuniones de Hong Kong, quienes expresaron su preocupación por la posible pérdida de confianza del ahorro en los instrumentos financieros, sometidos a constantes cambios en su fiscalidad.

"En ningún caso aumentaremos los impuestos sobre los partícipes, que tienen sus reglas del juego ya marcadas", aseguró Rodrigo Rato. "Nuestra intención es la de mejorar las condiciones del ahorro a largo plazo", subrayó.