El fiscal exculpa a Manglano y acusasolo a Perote por las escuchas del Cesid

MadridEl Cesid y su director general durante de 1981 a 1995, Emilio Alonso Manglano, obraron correctamente a la hora de practicar escuchas teléfonicas, ya que la captación aleatoria de comunicaciones mantenidas a través de teléfonos móviles fue una actividad lícitamente desarrollada por el Cesid en el cumplimiento de su misión de proteger la seguridad nacional. Quien no procedió de acuerdo con la ley fue el Jefe de la Agrupación Operativa del organismo, coronel Juan Alberto Perote, que se sirvió de las grabaciones para realizar un uso ilegal de las mismas. Éstas son la s tesis principales del informe técnico que, según publica hoy el diario Abc, el fiscal que actúa en el sumario por las escuchas del Cesid ha remitido a la titular del Juzgado de Instrucción Número 43, Ana María Pérez Marugán.

Según Abc, el fiscal sostiene que el servicio de inteligencia no disponía entre 1984 y 1991 de equipos técnicos con capacidad para seleccionar las frecuencias, de modo que la grabación de las conversaciones pudo ser fortuito. De ello se desprendería, según el fiscal, que no hubo una interceptación ilegal de comunicaciones telefónicas y, por ende, que la actividad de los funcionarios del Cesid no fue delictiva. El delito sólo habría consistido en el uso que Perote dio a las conversaciones.