La CE cree que el "simulcrypt" incentiva al sector

Los técnicos comunitarios creen que el debate sobre los descodificadores está distorsionado en España porque se ha centrado en si son abiertos o cerrados. Bruselas sostiene que eso es secundario porque ambos modelos son abiertos, con la diferencia de que uno, el simulcrypt, requiere el acuerdo previo de su propietario para permitir el acceso de su rival. Y esa es su gran virtud, porque protege la inversión realizada e incentiva la colaboración entre distintas plataformas y el desarrollo del sector. El multicrypt, en cambio, permite que un operador pueda aprovecharse gratis de la inversión del otro, reduciendo así las expectativas de crecimiento de la televisión digital.El Ministerio de Fomento ha sido uno de los principales interesados en intentar extender esa imagen -por lo demás falsa- de que un descodificador es abierto y más próximo al mercado libre, y el otro cerrado y propenso a favorecer las posiciones de dominio de una plataforma sobre otra.

Los técnicos de la Comisión Europea creen que ese planteamiento es absolutamente equivocado, aunque se guardan mucho de admitirlo públicamente. A su juicio, la diferencia entre ambos descodificadores no está en si son abiertos o cerrados, sino en que el multicrypt es abierto desde abajo -permite siempre transmitir la imagen de varios operadoresmientras que el simulcrypt lo es desde arriba: sólo adquiere su carácter abierto si el operador acepta transmitir a un abonado la señal del rival.

"Si se impone el descodificador que llaman abierto [el multicrypt] se obliga a financiarlo a los operadores y corres el riesgo de que tus competidores lo usen gratis. Por eso la Comisión busca los acuerdos entre opera dores a partir del simulcrypt: yo hago la inversión, pero tú me vas a pagar algo por utilizarlo. Es para que se desarrolle el mercado más rápidamente", señalan fuentes comunitarias.

Es decir, para Bruselas, a largo plazo, las consecuencias de ambos descodificadores son inversas a las que plantea Fomento. El simulcrypt (Canal Satélite) favorece el desarrollo rápido de la televisión digital, mientras que el descodificador abierto, el multicrypt de Vía Digital, puede fomentar el parasitismo inversor, y por lo tanto frenar el crecimiento del sector.

¿Por qué? Porque el primero garantiza al inversor que su dinero no puede ser utilizado deslealmente por la competencia para conseguir abonados sin tener que pagar el descodificador. La Comisión Europea entiende que basta con aplicar la actual normativa de la Competencia para evitar las posiciones de dominio que algunos temen que pueda generar un descodificador como el simulcrypt.

Y citan un precedente muy gráfico: los antiguos monopolios telefónicos son propietarios de la red básica de telefonía y la ceden a sus nuevos rivales a cambio de un canon. No la ceden gratis, como ocurriría en el sector de la televisión digital si se impusiera un descodificador como el multicrypt. Si se aplicara ese modelo a la telefonía básica sería tanto como permitir a los nuevos operadores que utilizaran la antigua red sin compensar a los que invirtieron cientos de miles de millones de pesetas en crearla. Es como si Retevisión no pagara ni un duro a Telefónica por utilizar su red para quitarle clientes.

Ese canon es lo que deben negociar los operadores de televisión digital. Y en el caso de que alguno se negara a negociar o pretendiera aplicar precios abusivos, la normativa europea sobre la Competencia obligaría al acuerdo, como ocurre en la telefonía básica.