El PSOE rechaza el pacto educativo con el PP si no aumenta 450.000 millones su financiación

"Imposible e inviable". Así ve la oferta de pacto sobre la reforma educativa, realizada por el coordinador general del PP, Ángel Acebes, el portavoz de la Ejecutiva Federal socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba. El PSOE rechaza cualquier posibilidad de fraguar un gran pacto sobre asuntos de Estado con los populares porque ya sólo en asuntos educativos se sitúan, ideológica y financieramente, "en las antípodas" de ellos. Un estudio elaborado por expertos del PSOE estima en al menos 450.000 millones de pesetas el incremento presupuestario necesario sobre el previsto por el Gobierno para aplicar las reformas programadas en la Ley de Ordenación General del Sistema Educativo (LOGSE).

La oferta para un "gran pacto de Estado" entre el PP y el PSOE lanzada por Ángel Acebes abarca asuntos tan trascendentales como el modelo autonómico de España, la política local y la educación y la sanidad públicas. En principio, el PSOE acepta conversar de todo con el PP, pero no se engaña sobre las intenciones reales de esa propuesta. "Esta posición es pura retórica veraniega y sólo la plantean para tapar sus vergüenzas porque luego, en el presupuesto, que es donde hay que comprometerse, no lo hacen", indicó ayer Alfredo Pérez Rubalcaba.Rubalcaba sí cree "necesario" otro acuerdo autonómico diferente al negociado entre el Gobierno y sus socios nacionalistas y afirma que hasta éstos han comprobado ya que el vigente "es un desastre y un dislate". El PSOE negociaría un nuevo pacto si éste no se limitase a retocar los estatutos de autonomía de las comunidades regidas por el artículo 143 como ha sugerido el PP, sino que se extendiera a debatir sobre todo la financiación.

En cualquier caso, las diferencias profundas, "abismales", entre el PP y el PSOE se observan especialmente en la concepción de la educación y la sanidad pública.

Los expertos en educación del PSOE han elaborado un informe interno para conocer al detalle el coste real de la aplicación de las reformas previstas en la LOGSE. Sólo la inversión necesaria para implantar la educación secundaria en las autonomías que aún no tienen esta competencia transferida (Asturias, Cantabria, La Rioja, Murcia, Madrid, Baleares, Extremadura, Castílla y León, Castilla-La Mancha, Aragón, Ceuta y Melilla) se situaría en 196.240 millones de pesetas.

Ésta no es una cifra teórica o especulativa. Los técnicos socialistas han calculado en 236 el número de institutos nuevos a construir (94.400 millones), en 9.440 la plantilla de profesores y personal a contratar (35.400) y en 15 millones el gasto medio de funcionamiento de esos centros (3.540). También han estimado en 30.900 millones la aplicación de los nuevos conciertos educativos, que amplían la edad escolar obligatoria, en secundaria, de los 14 a los 16 años.

Los equipos para completar las nuevas ofertas de la Formación Profesional costarían otros 20.000 millones y la Garantía Social (más servicios para la demanda de los alumnos) 12.000.

El Ministerio de Educación no tiene previsto este dinero para el nuevo curso. La transferencia de esta materia a las citadas comunidades autónomas se pretende cubrir con los 804.000 millones fijados como el coste efectivo de esos servicios ya en el presupuesto de 1997. Ni un duro más. Las necesidades futuras deberían nutrirse del incremento en la recaudación fiscal que lograsen las propias autonomías.

El PSOE no acepta este sistema. Cree que es injusto territorialmente, insolidario fiscalmente y también insuficiente desde el punto de vista presupuestario, según Clementina Díez, su portavoz en materias educativas. Varias comunidades también lo rechazan.

Díez entiende que es ahí, en la reclamación de una mayor dotación presupuestaria, donde la ministra de Educación, Esperanza Aguirre, debe demostrar que defiende la enseñanza pública y no en "vender humo y en ofrecer un pacto para la foto cuando lo que de verdad hizo este año es aumentar en 34 los institutos privados concertados, ocho de ellos del Opus".

El PSOE no negociará ningún pacto educativo si antes el Gobierno y suministra no plantan sobre la mesa los 450.000 millones de más sobre los 804.000 programados en 1997 y que sólo servirían para mantener como está la enseñanza secundaria antes de su transferencia.

Ese incremento de 450.000 millones, a repartir en cinco años, es el mínimo que los socialistas estiman preciso para poner en marcha las reformas de la LOGSE en las autonomías aún sin educación (196.240 millones) y extenderlas a las que ya disponen de esa competencia.