El Gobierno exige a Cuba la apertura del centro cultural español en La Habana

El Gobierno de José María Aznar exige al de Fidel Castro la apertura del centro cultural de España en La Habana como un gesto de buena voluntad antes de designar un nuevo embajador en Cuba. Ésta es una de las condiciones de la discreta negociación del Ejecutivo, que, según altos cargos de Asuntos Exteriores, no nombrará un nuevo representante diplomático en la isla antes de finales de año. Se espera, sin embargo, que el nuevo esté ya presente durante la visita del papa Juan Pablo II a Cuba, prevista para mediados del próximo mes de enero.

La visita del papa Juan Pablo II a Cuba ha despertado gran interés en medios diplomáticos occidentales, ya que consideran que este viaje servirá para poner a prueba la solidez del régimen cubano.Mientras tanto, no con interés, sino con hostilidad, es como ven las actividades del centro cultural de España en La Habana las autoridades cubanas, que han incrementado en los últimos meses la vigilancia y la presión sobre los grupos disidentes que buscan el amparo de las embajadas de los países occidentales.

La crisis económica y los ataques terroristas contra la industria turística, primera fuente de ingresos de la economía ubana, han creado un clima de tensión política que se ha traducido en un endurecimiento de la represión.

La tensión entre los Gobiernos de Madrid y La Habana ha ido decreciendo en los últimos meses tras la retirada del plácet como embajador español a José Coderch en represalia por el activo papel adquirido por España en la adopción de una postura común de la Unión Europea frente a Cuba.

Diversos incidentes, como la retención de un turista español tras un accidente de tráfico, agudizaron una tensión que ambas partes dicen ahora estar dispuestas a reconducir.

La progresiva normalización de relaciones entre Madrid y La Habana se concretará en una entrevista que mantendrán probablemente en Nueva York el ministro de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, y su homólogo cubano, Roberto Robaina, en el marco de los habituales contactos bilaterales que se realizan durante la Asamblea General de las Naciones Unidas, que comienza el próximo septiembre.

Política de Estado

La pronta normalización de las relaciones con Cuba fue también abordada por el nuevo secretario general del PSOE, Joaquín Almunia, que recientemente se entrevistó con Matutes.Ambas partes coincidieron en la necesidad de tratar la política exterior como una política de Estado y el secretario general de los socialistas urgió al nombramiento de un nuevo embajador español en Cuba.

La conmemoración el próximo año del centenario de la retirada de España de Cuba, tras la guerra hispano-norteamericana, es otro elemento favorable a la normalización de relaciones entre ambos países. En diversas ocasiones se ha barajado la posibilidad de que este aniversario sea la ocasión para la visita del rey Juan Carlos Cuba, el único territorio de América que todavía no ha visitado.

Sin embargo, y según las previsiones, España llegará a la próxima cumbre Iberoamericana, que se celebrará el próximo noviembre en Venezuela, sin haber designado embajador en Cuba, lo que no facilitará el diálogo sobre la democratización en el continente, que fue el principal documento aprobado en la última cumbre, en Santiago de Chile.