La aspirina celebra hoy su centenario

El ácido acetilsalicílico cumple hoy un siglo desde que su descubridor, el investigador alemán Félix Hoffman, registrara la síntesis de este derivado, componente básico de la aspirina, y que hoy cuenta en España con unas cifras de consumo anual superiores a los 650 millones de unidades. Este ácido, derivado de una sustancia natural que se encontraba en la corteza del sauce blanco y que Hoffman encontró mientras buscaba un remedio para aliviar la artitris reumatoide de su padre, se convirtió en poco tiempo en uno de los fármacos más populares con un consumo de 216 millones de comprimidos diarios en todo el mundo, según datos de la compañía que lo comercializa.Para el medicamento, que salió al mercado en 1899, se buscó un nombre no químico: Aspirin derivado de la planta donde se obtiene el producto (Spirea) junto a la A de Acetil como prefijo y el sufijo In. Recientemente, la Agencia para la Alimentación y los Medicamentos (FDA) de EE UU, propuso que la aspirina fuese etiquetada como fármaco indicado para la prevención de la trombosis cerebral.

En España, el equipo del doctor López Farré, de la Fundapión Jimenez Díaz, descubrió, en 1995, el mecanismo de acción de la aspirina para prevenir el infarto de miocardio. Con la ingesta de aspirina, el óxido nítrico, que evita la obstrucción sanguínea, conserva su capacidad y su calidad de acción, reduciendo así el riesgo de infarto.

Aunque originalmente fue concebido como un fármaco para tratar el dolor y la fiebre, las investigaciones llevadas de equipos médicos de todo el mundo han permitido probar sus beneficios en otras enfermedades como la artritis reumatoide, la fiebre reumática y la artrosis.