La unión de los partidos democráticos logra arrebatar a HB la alcaldía de Mondragón
Al final, no hubo sorpresas en Mondragón, El peneuvista José María Loiti ya es el nueve alcalde de esta localidad guipuzcoana al prosperar ayer la moción de censura presentada por los partidos del tripartito (PNV, EA y PSE-EE). Sus 12 votos más el del edil del PP posibilitaron arrebatar a Herri Batasuna (HB) el más emblemático de sus gobiernos municipales en Euskadi. Los representantes de IU apoyaron su abstención con el argumento de que "el aislamiento" de HB no es "una herramienta política justificable". La votación se hizo a mano alzada a pesar de que HB había pedido que fuese secreta.
Faltaban 15 minutos para el inicio de la sesión cuando el salón principal del Ayuntamiento de Mondragón se encontraba abarrotado de militantes de todas las formaciones representadas en él. Los simpatizantes de HB, que exhibieron fotos de una quincena de presos de ETA, insultaron a los ediles del PNV, EA y el PSE. Frases como "los podridos a la calle" y "traidores" fueron escuchadas, sin inmutarse, por todos ellos.Los concejales del tripartito estuvieron arropados por dirigentes de todas las ejecutivas guipuzcoanas. Incluso el alcalde saliente, Xabier Zubizarreta (HB), reclamó en repetidas ocasiones a los exaltados calma y respeto para que el pleno pudiera celebrarse democráticamente.
El nuevo regidor, el peneuvista José María Loiti, no pudo pronunciar ninguna palabra tras ser elegido debido a los constantes abucheos de la mayoría del público. Trece votos -cinco del PNV, cuatro del PSE-EE, tres de EA y uno del PP- fueron necesarios para que HB, que cuenta con el un momento de la moción de 26,7% de los sufragios del municipio, perdiese una alcaldía que ha gobernado en minoría en esta legislatura.
Algunos asistentes profirieron frases como: "Ya tenemos el alcalde más idiota de la provincia". Loiti tuvo que abandonar el salón custodiado por un importante dispositivo de ertzainas, de paisano, que se habían desplegado por todo el edificio.
HB consiguió gobernar Mondragón tras los comicios de 1995 debido a que dos concejales de EA incumplieron los acuerdos para quitar a la coalición independentista las alcaldías en aquellos municipios en que el tripartito era mayoritario.
En el debate de la moción de censura de ayer tan sólo hubo dos intervenciones, la del portavoz de HB, Juan Luis Arexolaleiba, y la del de IU, Joseba Ugalde. Durante los discursos de ambos los presentes permanecieron en silencio.
Arexolaleiba culpó a los partidos democráticos y a los medios de comunicación de haber utilizado a la izquierda abertzale para sus intereses políticos. Dirigiéndose a ellos, dijo a los miembros del tripartito que han arrebatado a HB la alcaldía no por el bien del pueblo, sino por el suyo propio. Y añadió que "sería triste que esta moción fuese un paso atrás para Euskal Herria".
Ugalde justificó la abstención de IU debido a la ausencia de un programa político. La moción, según este edil, también suponía "una manipulación interesada de determinadas formaciones políticas y medios de comunicación". Finalmente, abogó por la reconciliación como paso previo para conseguir la normalización en el País Vasco y pidió el acercamiento de los presos etarras a la comunidad por ser "un derecho jurídico".
Zubizarreta dio la palabra al público antes de la votación y tan sólo hubo dos intervenciones de simpatizantes de HB. Uno dijo que la muerte de Miguel Ángel Blanco, concejal del PP en Ermua (Vizcaya), había sido "manipulada" para "satanizar a las personas de la izquierda abertzale". Además, añadió, que la nueva elección es "antidemocrática, totalitaria y antipopular". El otro dijo que los partidos de Ajuria Enea han arrebatado la alcaldía a HB para justificar el avance "del nacionalismo racista español". Y comparó las multitudinarias manifestaciones contra ETA con las que se celebraban "en la Alemania nazi, la España de Franco y la Italia de Mussolini".
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