El ex dictador boliviano Bánzer promete respetar la democracia en su mandato

Jaime Paz Zamora, el ex presidente boliviano y principal aliado del nuevo Gobierno, ha logrado reflejar con la frase "murió el Bánzer de las dictaduras, ahora vive el Bánzer de la democracia" el cambio que vive Bolivia al inaugurar la última Administración del siglo. Bajo la presidencia de Hugo Bánzer, quien asume legal y legítimamente el mando de la nación más pobre de América Latina.Bánzer juró respetar y hacer respetar la Constitución durante una ceremonia en la Cámara de Diputados, donde su joven vicepresidente, Jorge Quiroga, le impuso la banda y la medalla presidenciales en un acto que consolida la institucionalidad democrática boliviana. El nuevo presidente reiteró su compromiso de trabajar para que la sociedad boliviana "sea un espacio en el que valga la pena vivir y en el que prevalezcan los valores democráticos y los sentimientos cristianos de amor".

En su discurso señaló el propósito de su Gobierno de luchar contra la pobreza a través de un fondo de desarrollo y programas que eliminen el analfabetismo de los adultos, que doten de servicios básicos a toda la población, ahora de 7,5 millones de habitantes. El nuevo Gobierno concentrará también sus esfuerzos en la lucha contra el narcotráfico, cortando el suministro de productos químicos, destruyendo las bandas de delincuentes y erradicando la producción de hoja de coca, que se usa como materia prima de la cocaína, de la que Bolivia es el segundo productor mundial, tras Perú.

Para cumplir con este objetivo le acompaña un Gabinete ministerial integrado por Javier Murillo, de Asuntos Exteriores; Guido Nayar, del Interior; Carlos Iturralde, de Presidencia, y Fernando Kieffer, de Defensa, además de otras 10 carteras encargadas del sector económico y social.

Apretado programa

El príncipe Felipe de Borbón, que desde su llegada el martes a La Paz volvió a cautivar a la ciudadanía boliviana, asistió a los actos de transmisión de mando junto a los presidentes de otras seis naciones latinoamericanas y representantes de medio centenar de gobiernos y organismos multilaterales.El príncipe de Asturias cumplió un apretado programa de actividades y se reunió con el expresidente Gonzalo Sánchez de Lozada, el nuevo gobernante Hugo Bánzer y con otros líderes políticos bolivianos.