El alcalde de Ermua condena el boicoteo a los radicales

El Ayuntamiento de Ermua y su alcalde, el socialista Carlos Totorica, pidieron ayer a los vecinos que cesen en el boicoteo que están realizando a los comercios de esta localidad cuyos propietarios son simpatizantes de Herri Batasuna (HB). Una representación de estos últimos había transmitido su preocupación por el alarmante descenso de clientela que han registrado en sus establecimientos desde que se produjo el secuestro y asesinato de Miguel Ángel Blanco Garrido.El alcalde condenó esta "caza de brujas" que consideró "impropia de una sociedad democrática". Totorica, que ha liderado la rebelión contra la banda terrorista ETA y el duelo que durante cuatro días protagonizaron los vecinos de esta localidad, condenó ayer este boicoteo y pidió a los vecinos que no mantengan esta actitud con los radicales. "Son gentes como nosotros; tienen sus ideas, mejores o peores, más equivocadas o menos, pero desde el Ayuntamiento apostamos y queremos impulsar actitudes que no propicien el aislamiento, sino la integración de las personas", afirmó.

La idea de aislar a los vecinos que simpatizaran con la izquierda radical, y más concretamente a los comerciantes de esta ideología, se lanzó de forma anónima, como una expresión más de cólera, a las pocas horas de conocerse el asesinato de Miguel Ángel Blanco. Octavillas y pasquines que se prodigaron por Ermua animaban a sus habitantes a no pisar más las tiendas de simpatizantes de HB. "Vamos a hundirles como nos han hundido a nosotros y a cambiar la vida de los que apoyan a los asesinos", se decía textualmente.

Las consecuencias de esta actitud, que se ha aplicado rigurosamente, han producido los primeros damnificados que se han quejado a los munícipes alarmados por la difícil situación que están atravesando a consecuencia del boicoteo.

Premio Nobel de la Paz

La ejecutiva de Guipúzcoa del Partido Socialista de Euskadi (PSE) acordó ayer impulsar la propuesta para que el pueblo de Ermua sea propuesto como candidato al premio Nobel de la Paz. Los socialistas iniciaron ayer las primeras gestiones ante las instituciones para que apoyen esta iniciativa, que significa un reconocimiento a la masiva reacción pacífica que ha tenido Ermua ante la trágica ejecución por ETA de su representante. Ya cuentan con el apoyo incondicional de la Fundación Príncipe de Asturias, el Ararteko (Defensor del Pueblo del País Vasco) y la Asociación pro Derechos Humanos de Euskadi.La ejecutiva del PSE considera que "existe un antes y un después en la política vasca" tras las movilizaciones de los partidos y las asociaciones pacifistas en el logro de la paz y la libertad.