_
_
_
_

Los tres tenores convierten su concierto en un homenaje a Miguel Ángel Blanco

65.000 personas acudieron al espectáculo lírico del Camp Nou

En Barcelona, la noche tenía que ser ayer de los tres tenores, pero José Carreras, Plácido Domingo y Luciano Pavarotti convirtieron su concierto en el Camp Nou en un acto de solidaridad con la familia de Miguel Ángel Blanco, asesinado por ETA. Tres minutos antes del inicio del concierto, la aparición de lazos negros en las dos pantallas situadas a ambos lados del escenario puso en pie a las 65.000 personas del Camp Nou, que mostraron su solidaridad conplausos. Los tenores aparecieron, y Carreras anunció que el concierto era para Miguel Ángel Blanco y su familia.

El público, puesto en pie, guardó un minuto de silencio. Los aplausos y el silencio dieron paso a la música. El espectáculo lleva ya muchos kilómetros a sus espaldas y Carreras, Domingo y Pavarotti conocen a la perfección sus respectivos papeles. La organización, sin embargo, fue cercana al caos. Un buen número de espectadores se encontró a su llegada al Camp Nou con que les habían cambiado las localidades sin aviso previo. Incluso se produjo un conato de revuelta cuando un sector situado al final de la improvisada platea del estadio se negó con sonoras protestas a cambiar sus butacas por otras situadas más lejos del escenario, aunque de precio más caro. Nadie consiguió convencerles de que el cambio era para mejor y optaron por presenciar el concierto desde una alfombra roja delante de la primera fila de platea.El espectáculo de los tres tenores no tiene secretos. Un guión confeccionado con precisión milimétrica, en el que se empieza con canciones y arias de óperas menos conocidas para ir, poco a poco, creando un clímax que llega a su cenit hacia el final de cada una de las dos partes. Allí están situadas estratégicamente las arias más populares, 'La donna é mobile', de Rigoletto, de Verdi, y 'Nessum dorma', de Turandot, de Puccini.

Popurrís

Al final, los medleys, uno al final de cada una de las partes, provocaron el júbilo del público. En estos popurrís, los tenores se pasan las melodías fragmentadas y enlazadas uno a otro como si de un balón de fútbol se tratara. Al final, los tres realizaron una jugada conjunta que confluye en el agudo final. El entusiasmo del público crecía a medida que la pieza interpretada era más popular y los aplausos interrumpían cuando Domingo entonaba fragmentos de zarzuela.El concierto se cerró con la interpretación de L'emigrant. El público encendió mecheros llenando el Camp Nou de lucecitas y aplaudiendo a Domingo y Pavarotti cuando cantaban en catalán. El desfase, de décimas de segundo, entre la emisión de la voz por los tenores y la audición del sonido por el público, muy evidente a través de las pantallas situadas a ambos lados del escenario, provocó más de un malévolo comentario por parte del público, que aseguraba que los tenores cantaban en play-back. El desfase, común en este tipo de conciertos masivos, es producto de la sincronización del sonido para que éste llegue en el mismo momento a todos los espectadores, cercanos y alejados. La calidad global de la sonorización del concierto fue notable.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_