Los campesinos son fieles al partido oficial
La rústica plaza central, con su templete de acero y su ruidosa banda de música, estaba abarrotada de votantes verdes mexicanos, que regresaban de su jornada en el campo. Pero no había ecologistas entre ellos. Eran gente de granja, hombres con sus sandalias de cuero y sus sombreros de paja, y mujeres de largas faldas y delantales al viento.En México, verde se refiere al voto rural, no al ecologista. En las elecciones de ayer, lo resultados en el campo iban a ser cruciales.
El Partido Revolucionario Institucional (PRI), que ha estado en el poder cerca de 7 años, está luchando contra una ola de descontento en la ciudades. Pero en los distrito electorales rurales, que representan un tercio del total continúa siendo el favorito indudable. Si el partido oficial gana de nuevo escaños suficientes para dominar las dos cámaras legislativas será gracias al voto rural.
Los observadores electorales dicen que no hay condiciones en muchas áreas rurales para unas completas elecciones libres. Un nuevo e independiente consejo electoral ha tomado medidas extraordinarias para asegurar que el voto no esté tentado por los sobornos. Pero los votantes rurales la mayoría de los cuales tienen poca educación y viven en distritos alejados, son vulnerables a las presiones preelectorales del Gobierno y su partido para asegurar su voto, según estos observadores.
"Lo que vemos en las áreas rurales es un fraude parcial" dice Rogelio Gómez Hermosillo, un analista de la Alianza Cívica, la principal organización independiente de observadores electorales. "El voto a menudo está bajo coacción En muchos lugares, votar a la oposición es aún un acto semiheróico". Debido al diseño de los distritos electorales en México, los votos rurales representan un peso mayor en los resultados totales que los votos de las zonas urbanas.
