"Cumplo todos los requisitos"

El ex consejero de José María Aznar en el Gobierno de Castilla y León, Miguel Pérez Villa mostró, tras ser consultado por este periódico, su malestar por dos hechos: ser noticia y la tardanza del Ministerio de Indutria en concederle una subverción de entre 100 y 140 millones para su empresa Uría Moto "¿Por qué no me la dan ya cumplo todos los requisitos?". Asegura que la sentencia por prevaricación que le impuso el Tribunal Supremo en 1995 por conceder ilegalmente subvenciones "una condena política" a su entender, no le incapacita para recibir ayudas como empresario.Inicialmente, Pérez Villar niega su relación con Arenas de Bobia, pero luego reconoce su vínculos con tal empresa: participa a través de PV7 -"sólo tengo un tercio en ella", afirma, pero luego admite que el resto es de su mujer e hijos- y es consejero desde su constitución de Arena de Bobia, hecho que inicialmente decía no recordar. Luego, rechaza las insinuaciones de Industria de que camufló su presencia al solicitar la ayuda para Arenas de Bobia: "Yo no camuflo nada Yo no he pedido nada". También intenta marcar distancia respecto de Uría Motor: "Tengo acciones a título personal". En ella, comparte consejo con su mujer y con Mario Moliner.

El ex consejero no considera extraño que se haya asociado con Moliner, presidente de la patronal minera a la que asesoraba su esposa y a la que él subvencionó con más de 500 millones Tampoco advierte Pérez Villa ninguna irregularidad en que haya formado parte del consejo' de administración de empresa que previamente subsidió: "N tiene que ver. Soy asesor fiscal de empresas mineras. Cesé como consejero de Economía en 1991 y cualquier empresa es libre de meterme o no en su consejo de administración".