_
_
_
_

Jospin promete luchar por la Europa social

Enric González

El primer ministro francés, Lionel Jospin, presentó ayer ante la Asamblea Nacional el programa de su Gobierno. Y mantuvo hasta la última coma, aunque sin decir cómo iba a financiarlas, las promesas electorales: reducción de la jornada laboral de 39 a 35 horas semanales, creación de 350.000 empleos públicos, moralización de la vida política y reorientación de la construcción europea. Jospin admitió que el compromiso sobre empleo arrancado por Francia en la cumbre de Amsterdam, era insuficiente, pero anunció que perseverará.Su Gobierno desea el euro en los plazos revistos, dijo, y trabajará por un reforzamiento de la unión, siempre que ésta esté al servicio de los ciudadanos.

Más información
Lá bolsa reacciona mal

Lionel Jospin no había puesto los pies en el hemiciclo de la Asamblea Nacional desde que, en 1992, perdió su cargo ministerial y abandonó temporalmente la actividad política. Ayer volvió con aplomo y seguridad en sí mismo, convertido en un primer ministro casi todopoderoso por la postración en que la derrota electoral sumió tanto al presidente conservador, Jacques Chirac, como a los partidos de la derecha. Los diputados aprobaron su discurso de investidura con 297 votos a favor y 252 en contra.Jospin, líder de una coalición de toda la izquierda (socialistas, comunistas, ecologistas, radicales y republicanos anti-Maastricht), trató de complacer a unos y a otros :anunció el desmantelamiento del carísimo superreactor nuclear Superphénix y canceló el faraónico proyecto de canal entre el Rin y el Ródano, para los Verdes; anunció la abrogación de las leyes Pasqua y Debré contra la inmigración ' para los movimientos juveniles y los sin papeles, y subió un 4% el salario mínimo, para comunistas y sindicatos, que, sin embargo, consideraron insuficiente el aumento.

Aunque reivindicó su "derecho al error" y pidió que el grado de cumplimiento de sus promesas fuera evaluado en cinco años, cuando concluya la legislatura, Jospin pudo constatar que se enfrentaba a grandes impaciencias y que los compromisos europeos limitaban su margen de maniobra. Un diputado comunista votó contra la investidura por considerar que la firma del Pacto de Estabilidad en la Unión Europea hacía imposible desarrollar en Francia una política de izquierda.

Contradicción básica

El discurso de Lionel Jospin encerró una contradicción básica, que la oposición se apresuró a señalar. Entre los compromisos asumidos por el primer ministro, la mayoría requerían un incremento del gasto público: creación de empleo por la vía presupuestaria, adición de 35.000 agentes a la las fuerzas de policía, rehabilitación de un millón de viviendas desfavorecidas, incentivos fiscales a la reducción de la jornada laboral y a las pequeñas empresas, incremento de las dotaciones a las escuelas de los barrios más violentos, mayores subvenciones a la escolarización y a la familia, y un largo etcétera. Pero, a la vez, Jospin se comprometió a respetar los acuerdos europeos; es decir, a reducir el déficit presupuestario para acceder al euro y a cumplir el Pacto de Estabilidad.Jospin ha encargado una auditoría sobre la situación de las finanzas públicas y sólo concretará su programa legislativo sobre todo en lo económico, cuando disponga, a mediados de julio, de las cuentas exactas Se sabe ya que los ingresos fiscales son inferiores a lo previsto y que, por tanto, el déficit presupuestario, estimado oficialmente en un 3,5%, puede ser en realidad algo más alto. ¿Qué hará el líder socialista para cuadrar las cuentas? Ayer sugirió que acabaría con los ', privilegios" de las rentas más altas Pero aumentar los impuestos sobre una parte de la población no será suficiente para acercarse a los criterios de Maastricht, dado que descartó las medidas que el anterior Gobierno de Alain Juppé había previsto, como privatizaciones y recorte del funcionariado.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_