Los políticos mantienen sus divergencias sobre el amplificador de energía en Aragón

El final de las comparecencias de expertos para opinar ante la Comisión de Industria de las Cortes de Aragón sobre el proyecto del Amplificador de Energía del Nobel, Carlo Rubbia, no ha permitido acercar las posiciones de los grupos en cuanto a la seguridad y a la viabilidad del mismo. Las siete sesiones en las que se han desarrollado las 31 intervenciones de expertos han mantenido, e incluso aumentado, las distancias entre los criterios del Grupo Popular y los de la oposición (PSOE, IU y CHA).El PAR, coaligado con el PP en el Ejecutivo regional y único Grupo que todavía no ha tomado una decisión, sigue sin expresar una posición clara, aunque ya ha afirmado que el proyecto no debe de ser una de las principales prioridades del Ejecutivo regional. Uno de los puntos en los que más ha incidido la oposición, basándose en las declaraciones de los expertos que ha invitado, es que se trata de un reactor nuclear con posibilidades de fabricar armas nucleares, cuestión que ha sido rechazada por algunos de los expertos del PP, que han definido al AE como "un sistema subcrítico".

El premio Nobel de física, el francés George Charpack, que compareció a petición del PP, restó importancia a la peligrosidad del proyecto, debido a que al ser un sistema subcrítico, está "por debajo del nivel mínimo necesario para que se pueda producir una explosión nuclear".

Dos aspectos, el económico y los plazos de construcción, fueron otros de los puntos en los que más tiempo se utilizó en su discusión, debido a las grandes discrepancias entre los comparecientes. Mientras expertos más cercanos al proyecto, como el catedrático de física nuclear de la Universidad de Zaragoza, Rafael Nuñez Lago, mantuvieron que en cinco o seis años será posible la instalación de] primer laboratorio, otros especialistas defendieron que será necesario un mínimo de diez años para. que éste se lleve a cabo.

En cuanto al presupuesto para. su Construcción se han barajado distintas cifras, como la aportada. por el representante del Servicio Mundial de Información de la, Energía, Mathieu Pavageau, quien recordó que en Francia el reactor de alta velocidad "Superfenix" costó 60.000 millones de francos, mientras que varios accionistas de la empresa promotora han mantenido que el coste estará sobre los 20.000 millones de pesetas.

Aedenat y Greenpeace así como algunos catedráticos que comparecieron a petición de la oposición, han defendido como más interesante para Aragón la potenciación de energías renovables, como la cólica o la biomasa, en lugar de la nuclear.