Dos razones más

Cuando leía el editorial del pasado miércoles día 4 titulado Robin Hood al revés, además de coincidir cola su contenido, por sencillo y claro, no pude menos que intuir dos razones más que sumar a las ya apuntadas por el editorialista con relación al afán privatizador de doña "des-Esperanza" Aguirre, que en lugares como en nuestra comunidad, Castilla y León, hacen que la enseñanza pública sea aún más vulnerable. La primera es meter por la vía de los hechos en un gueto a la enseñanza pública rural, especialmente a la secundaria; así, se "invita" a muchos padres, preocupados razonablemente por la merma de la calidad, a llevar a sus hijos / as a internados privados de la capital.La segunda razón está en los tristemente famosos 1,5 puntos introducidos en el baremo de selección de alumnos bajo el eufemismo "cualquier otra circunstancia libremente apreciada". La capacidad que le otorga a los propietarios de los centros privados de modificar los listados de alumnos admitidos a favor de aquellos a los que libremente" se les aprecie cualquier otra circunstancia es total. La selección está asegurada. Pero lo peor de todo es que, a pesar de todas las críticas, el modelo sigue adelante, sus efectos van siendo irreversibles y de nada o de casi nada podría servir que a medio plazo se pudiera proceder por la misma vía a modificarlo. En educación ya sería tarde.

Sólo le veo una alternativa: o sumamos ahora todas las fuerzas progresistas en defensa de la enseñanza pública de calidad o en tres años se ha desmantelado uno de los pocos bastiones de la igualdad en una sociedad desigual: la educación pública de calidad. No caigamos. en la des-Esperanza. Es su objetivo.-