50 minutos de altercado y suspense

La votación de la ley del fútbol tuvo un descanso inesperado de 50 minutos. El punto más ácido llegó cuando el PP condicionó su apoyo a la enmienda de IU sobre el pago por visión a que este grupo introdujera una modificación. Esta enmienda decía que las negociaciones entre operadores y titulares de los derechos deben salvaguardar, entre otros principios, la "estabilidad económica de los titulares de los derechos". Canal Satélite Digital, por ejemplo.Pero el PP reclamó que en la Comisión Constitucional, Inés Sabanés, ponente de IU, se había comprometido, como constaba en el Diario de Sesiones, a sustituir "titulares de los derechos" por "clubes y sociedades anónimas deportivas". A IU se le olvidó la modificación, y PSOE y CiU exigieron que la enmienda se votara tal y como estaba en el dictamen de la Comisión, como, en su opinión, establece el reglamento.

Tras múltiples discusiones con los portavoces y miembros de la Mesa, el presidente del Congreso, Federico Trillo, suspendió el pleno "cinco minutos" para reunirse con los portavoces. En realidad fueron 50. A su regreso, Trillo autorizó la rectificación. El portavoz del PSOE, Joaquín Almunia, expresó su queja: "El Parlamento es ley y norma, no la arbitrariedad ni la interpretación sesgada".