Julio Aparicio reclama toros "con hechuras normales"

Los duendes tienen en Julio Aparicio su mejor acuartelamiento. Muy pocos toreros se muestran "tan resignados" ante los gestos imprevisibles de lo fatídico. "Es algo que no puedo evitar", manifiesta el diestro. Y precisamente por sentirse tan condicionado por soplos de misterios, alcanzan sus escasas ocasiones de perfección el sello "de lo mágico y divino", afirma el espada. En tales circunstancias, "el bicho que no sea del todo malo" se ve incorporado a "esa especie de sublimación abarcadora". "Pero para eso", matiza el torero, "necesito un toro con una hechura normal, de unos 500 k¡los, bravo, que embista y humille. Y no esos animalitos desfasaos que están saliendo actualmente".Al torero no le preocupa que sus oponentes sean astifinos. "Y cuanto más sean, mejor, porque ésa es la pureza y la integridad de la fiesta", asegura. "Lo que no se puede es interpretar el toreo con sentimiento si sale un animalito con hechuras de buey. Considero que pido lo mismo que cualquier otro compañero. Necesitamos una materia prima óptima para. poder sentirnos". "Ojalá sea así con los toros de esta tarde", asegura el madrileño.

Julio Aparicio es de los toreros que más se hacen esperar, de los que provocan la repulsa del "yo no veo más a este tío" y a la semana motivan un "vamos a verle por si acaso". No es exacto decir que viva de las rentas del pasado, sino más bien del futuro en una especie de amenaza artística. "Cuidado porque a lo mejor os perdéis hoy la mejor de sus faenas", aseguran sus incondicionales.

Confianza de José Tomás

Dama, Manolete y Boby son los perros del matador José Tomás. "Estar con ellos me relaja y me da fuerzas para enfrentarme a un reto tan importante como el de esta tarde", manifiesta. "Desearía salir de esta plaza revalorizado, es decir, contando con el reconocimiento de los compañeros. Porque", señala, "para mí es mucho más importante que el del público".José Tomás asegura que los nervios no le traicionan. "Duermo de maravilla, porque tengo mucha confianza en mí mismo. La seguridad de alguien que se juega la vida todas las tardes es fundamental. Por eso", comenta, "creo que tengo grandes posibilidades de hacer realidad el sueño de abrir la puerta grande".

Luis Manuel Lozano, ex novillero, apoderado, sobrino de los empresarios de Las Ventas y ganadero, asegura que la corrida de esta tarde "no va a blandear porque ha estado expuesta en la Venta del Batán acostumbrándose al hábitat de la plaza".