La escuela italiana potenciará la economía la historia y el inglés

Materias consideradas hasta ahora sesudas y propias de los ciclos de enseñanza superiores, como la economía y la historia, se convertirán, además del estudio del inglés, en el pan escolar cotidiano de los alumnos de enseñanza básica en Italia, según las líneas generales de un nuevo plan de estudios preparadas por una comisión de intelectuales, que fue entregado el martes al presidente de la República, Oscar Luigi Scalfaro, y está en Internet a disposición del público.

Este borrador de plan fue encargado por el ministro de Educación, Luigi Berlinguer, a 39 personalidades de las letras, las ciencias y las artes, como el semiólogo Umberto Eco, el novelista Antonio Tabucchi, la Premio Nóbel de biología Rita Levi Montalcini, el ex fundador del diario La Repubblica, Eugenio Scalfari, o el violinista Uto Uglli.Incluso la filosofía, en tanto que base de la capacidad de razonamiento y dominio de la expresión ordenada que el plan se propone como objetivo fundamental de la educación, entra con fuerza en el ámbito escolar de más pequeños. Y lo hace por una vía liviana, como el resto de las disciplinas, ya que el informe de los 39 sostiene que el maestro debe convertir toda enseñanza en un juego y que el alumno debe aprender a jugar con todos los elementos de la escuela, incluídos los libros.

El cine, la música rock y pop, los medios audiovisuales y las nuevas tecnologías informáticas y telemáticas destacan en la otra cara de un sistema educativo orientado a insertar al niño en el mundo contemporáneo. Esa orientación queda patente en la propuesta de que el estudio de la historia comience por el siglo XX. Pero el informe de los 39 no renuncia a un cultivo la cultura clásica, sin llegar a proponer la recuperación del latín y el griego para todos los alumnos, como se había rumoreado.

Antes de conocer las reacciones previsiblemente adversas de muchos maestros a este plan el ministro Berlinguer tendrá que enfrentarse al problema de los 65.000 enseñantes que han pedido jubilarse anticipadamente antes de que comience el curso próximo, por miedo a que la anunciada refoma del sistema de pensiones les prive del derecho que hoy tienen de convertirse en clase pasiva en cuanto cumplen los 35 años de servicio. El Gobierno anunció ayer que impondrá un aplazamiento a esta ola de peticiones que amenaza la apertura de las escuelas en septiembre.