González asegura que no responderá al acoso del PP y de su prensa con "bendiciones papales"

Felipe González advirtió ayer que no va a responder con "bendiciones papales" a la campaña de acoso contra el PSOE que, según sus datos, diseñaron el Gobierno del Partido Popular y sus asesores del sindicato",, en referencia a los periodistas que aconsejan al Gobierno y que, en su mayoría, están han estado asociados en la AEPI. El líder socialista tampoco va a permanecer callado ante un estilo de gobernar que califica de "amenazante". Y reclamó al Ejecutivo que aclare si es verdad que Hacienda ha dejado le cobrar 200.000 millones de pesetas a 500 contribuyentes por culpa de los socialistas: "Si se mintió en enero, que se diga que se mintió y se pidan excusas; si se dijo la verdad, quiero los 500 expedientes".

Felipe González pretendía hablar ayer del acuerdo para la es tabilidad del empleo, que le aca baban de entregar oficialmente la patronal y los sindicatos, pero no se resistió a ninguna de la pre guntas que le plantearon los periodistas sobre la crispación que domina la vida política. El líder socialista responsabilizó al PP y a un sector de la prensa -"sus apoyos sindicales, ya me entienden"- de ser los causantes de la tensión. Tiene la "convicción" de que los sondeos electorales desfavorables para el Ejecutivo son el detonante de esa estrategia contra el PSOE. Consiste, según sus palabras, en que "el Gobierno haga también el papel de oposición". Esa campaña se diseñó en enero, y como los sondeos de marzo no cambiaron la situación, se decidió "más de lo mismo" para los meses de abril, mayo y junio. "Yo lo sé desde el 1 de abril", precisó.

González sostiene que esa es trategia se empieza "con una agresión brutal desde las más altas instancias del Gobierno", cuando en enero acusó a los socialistas de que Hacienda no pueda cobrar 200.000 millones de pesetas de expedientes abier tos a sus "amiguetes". Y no comprende como cinco meses des pués no se encuentran los su puestos 500 expedientes fiscales. "Si se mintió en enero, que se diga que se mintió y se pidan excusas; si se dijo la verdad, quiero los 500 expedientes", añadió.

Él desconoce si tendrá oportunidad de abordar esas cuestiones, en la entrevista que mantendrá con el jefe del Gobierno, José María Aznar, el próximo día 22, porque "el presidente tiene el privilegio de poner encima de la mesa si esos temas le interesan o no". Tampoco sabe si el encuen tro permitirá reconducir el am biente de crispación. Pero, en todo caso, si el PSOE sigue sufriendo la estrategia de agresión no van a "repartir bendiciones papales" y van a responder a quienes, a su juicio, "se han puesto innecesariamente nerviosos". Antes de su cita con Aznar, González se reunirá la próxima semana con Josep Antoni Duran Lleida, líder de Unió Democrática de Cataluña.

Entre las advertencias, González aseguró que este país tiene otros desafíos que le preocupan, como la política territorial, la justicia, la política exterior o la lucha contra el terrorismo, que está dispuesto a tratar con el Gobierno. Asimismo le parece importante la educación y la sanidad, pero sabe que en esas cues tiones hay grandes discre pancias.

El líder socialista cree también necesario mejorar las expectativas de empleo y de la negociación colectiva, objetivo del encuentro que ayer mantuvo con los líderes de la patronal y los sindicatos. González cree que el acuerdo logrado " supone un esfuerzo muy inteli gente" de los sindicatos. Y subrayó que el PSOE, atendiendo al requerimiento de los agentes sociales, que quieren que entre en vigor cuanto antes, apoyará la tramitación parlamentaria del pacto como decreto ley. Tan sólo pone como condición que el Gobierno le envíe los textos normativos antes de aprobarlos el viernes en el Consejo de Ministros, para analizar si respetan lo acordado.

La posición de la patronal y los sindicatos sobre el panorama político es discordante. José María Cuevas, presidente de la CEOE, no ve que exista crispación política: "La verán quienes están en el juego político; inmediatamente que sube de tono, se vuelve a poner en su sitio".

En cambio, los líderes sindicales hicieron un llamamiento a los partidos para. que moderen sus enfrentamientos. Antonio Gutiérrez, secretario general de CC OO, recordó que hace dos años, ante una situación similar, los agentes sociales predicaron con el ejemplo abriendo el diálogo social. Ahora cree que "sería bueno que quienes tienen la responsabilidad tratasen de superar los síntomas de crispación".

Cándido Méndez, líder de UGT, también subrayó la aportación de los agentes sociales a la mejora del clima económico y social con la firma de una serie de pactos. Respecto a la actuación de los partidos dijo: "No hay que rasgarse las vestiduras porque haya broncas, hay que verlo con cierta normalidad democrática, pero no se debe traspasar cierto límite".