El Principe heredero de Marruecos inicia una visita de cuatro días a España

El príncipe heredero de Marruecos, Sidi Mohamed, de 34 años, clave en la apertura iniciada por la monarquía alauí, inicia hoy una visita oficial de cuatro días a España, invitado por el príncipe Felipe, en un momento en que las relaciones hispano-marroquies son presentadas por ambas partes como excelentes. Licenciado en derecho y doctor por la Universidad de Niza, con una tesis sobre derecho comunitario, y general de división con cargo importante en la cúpula militar de su país, está considerado como una de las esperanzas de los sectores demócratas y liberales, que esperan que el proceso electoral de este año en Marruecos suponga una verdadera transición hacia un régimen con más garantías democráticas.

Esta visita, preparada con cuidado por el Ministerio de Asuntos Exteriores tras la última y caótica del rey Hassan II, hace ya casi siete años, es la segunda del príncipe Sidi Mohamed a España, donde ya estuvo en 1986. El heredero recibirá honores similares a los de un jefe de Estado, residirá en el palacio de El Pardo y se entrevistará con las más altas autoridades españolas. Además de ser recibido por los Reyes y el presidente del Gobierno, José María Aznar, mantendrá reuniones con el ministro de Exteriores, Abel Matutes, y el de Defensa, Eduardo Serra, y visitará el Congreso y el Senado. Perfecto conocedor del castellano, se desplazará al Instituto Cervantes, en Alcalá de Henares.Sidi Mohamed viaja acompañado, entre otros, por André Azulai, consejero de la Corona, de religión judía y uno de los animadores del proceso de apertura que probablemente desemboque en la llegada de los socialistas al Gobierno de Rabat. La presencia del Príncipe en un acto público de éstos supuso un gesto de reconciliación con un partido que ha sido tradicionalmente perseguido por el régimen de Hassan II.

Los socialistas mantienen una activa campaña contra la presencia española en Ceuta y Melilla, un tema vidrioso en las relaciones hispano-marroquíes, al que ninguna de las dos partes tiene especial interés en hacer referencia en estos momentos, menos durante la visita.

El conflicto del Sáhara, que ha vuelto a la actualidad con la nueva mediación del ex secretario de Estado norteamericano James Baker como enviado especial del secretario general de las Naciones Unidas, ha dejado de ser, en opinión de diplomáticos españoles, un tema que entorpezca las relaciones entre Rabat y Madrid.

Al igual que su padre, Hassan II, Sidi Mohamed está considerado como un firme partidario de estrechar las relaciones de Marruecos con la Unión Europea, cuyas instituciones conoce bien no sólo por sus estudios universitarios, sino también por su estancia durante cerca de nueve meses en Bruselas, siguiendo de cerca sus trabajos, cuando la Comisión estaba dirigida por Jacques Delors.Sólo una intervención pública

El heredero marroquí será recibido hoy en el aeropuerto de Barajas por don Felipe de Borbón y el ministro Matutes. El heredero de la Corona española, que ejercerá de anfitrión, le ofrecerá el miércoles un almuerzo en el Palacio Real al que asistirán unos 40 invitados, entre ellos el vicepresidente Rodrigo Rato y el ministro de Defensa, Eduardo Serra. En él este pronunciará un brindis de bienvenida al que responderá Sidi Mohamed en la que será su única intervención pública prevista en el programa oficial.

Don Felipe acompañará el jueves, en la última jornada de su visita, a Sidi Mohamed a Córdoba para visitar la Brigada número 10, acantonada en Cerro Muriano, una de las unidades más operativas del Ejército español. El heredero marroquí, que realizará una obligada visita a la mezquita y almorzará en un conocido restaurante, regresará a su país desde esa ciudad.