El máximo poeta árabe dice que más vale el terror que ceder ante Israel
Tras un largo y amargo silencio, el septuagenario poeta sirio Nizar Qabbani acaba de estremecer una vez más la conciencia árabe con 22 versos en los que proclama que es mejor ser tildado de "terrorista" que claudicar ante Israel o aceptar la cómplice apatía de los regímenes árabes que actúan como "gatos de la noche, aterrorizados por el fantasma de autoridad que hoy emana de las ratas""Es bastante triste, pero es cierto" "declaró ayer Qabbani a EL PAÍS por teléfono desde su exilio en Londres, horas después de la explosiva aparición de su última obra Estamos, pues, en favor del terrorismo, nada menos que en la primera página del diario panárabe Al-Hayat, de propiedad saudí.
El escritor palestino Said Abu Rish resumía ayer el efecto de esa obra con estas palabras: "Sus versos me han erizado la piel". En la calle Salahadín del Jerusalén árabe era imposible encontrar un ejemplar de Al-Hayat. Los amigos se pasaban fotocopias.
A diferencia del laureado poeta palestino Mahmúd Darwish, embajador cultural del Gobierno de Yasir Arafat, cuya lírica nace de una penosa nostalgia paisajista desde la egoísta perspectiva del cómodo París, Qabbani se ha empeñado siempre en poner el dedo en la llaga.
Qabbani denuncia la pusilanimidad de los árabes. Por eso no puede recitar hoy su trabajo en las cortes proocidentales de Oriente Próximo. Pero, en cambio, se comunica con el arraigado fatalismo árabe, en su visión, sin posibilidad de arreglo. Su canto fúnebre a 11 cielos sin colores rojos, azules ni siquiera amarillos", rescata la posibilidad de una solución femenina. En "una patria [árabe] donde es delito comprar un periódico o escuchar las noticias de la radio; en una patria donde incluso los pájaros ya se han cansado de cantar; en una patria donde el miedo ha acostumbrado a los escritores a escribir en sólo el aire...", la esperanza y el desafío está en las manos de mujeres que viven "en un país de hombres inseguros...".
[Un joven palestino resultó muerto ayer y otro herido por los disparos efectuados por soldados israelíes que habían sido atacados con piedras en Hebrón, informa la agencia France Presse].
