_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Szymborska

¡Por fin un poeta capaz de escribir una carta comercial!, como quería Gabriel Ferrater. Por fin un poeta y por fin un premio Nobel. Paisaje con grano de arena es el título que Ana Marla Moix y Jerzy Wojciech Slawornirski han puesto a los 100 poemas de Wislawa Szymborska que Lumen edita. Aún no sé polaco, pero esa traducción fluye con un ritmo y una naturalidad humanísimos. La palabra clara, menuda y perpleja del hombre. Poesía, como viene a escribir Slawomirski en su prólogo, a salvo. de la demolición vanguardista de la sintaxis, con los puntos y las comas en su lugar, significantes, con su empeño en extraer una música nueva del mestizaje léxico entre letras y ciencias, poesía como sentido y, sobre todo, poesía donde la ambigüedad -la ambigüedad y no la confusión, como tantos confunden- sólo expresa los límites del autor en su caza del mundo.Szymborska: nadie trató con ese potente desprecio a la muerte: "¡De acuerdo, tiene éxitos, / pero ¡cuántos fracasos, cuántos golpes fallidos e intentonas estériles!". Y eso que viene del lúgubre país, del país de Kantor y sus espesuras, del país gaseado. Szymborska en la frontera: "De los innumerables insectos, sólo mencionaré a la hormiga/ que, entre el zapato izquierdo y el derecho del aduanero, / a la pregunta ¿de dónde y adónde?, ni se molesta en dar respuesta". Szymborska, en el instante previo a que el azar se convierta en destino enamorado: "Hubo timbres y picaportes donde, antes de llegar la hora, la huella de una mano en otra se imprimió".

Digo "¡por fin un poeta!", como Jaime Gil de Biedma -que está en estos versos polacos tan presente, él y su tradición poética- decía (sobre el Stork Club decía) "¡por fin un bar!". Por fin un lugar para verse.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_