El general Lébed abre la puerta a una nueva colaboración con Borís Yeltsin

El general Alexandr Lébed, uno de los favoritos como futuro presidente de Rusia, dejó ayer abierta la puerta a una posible colaboración con el actual líder, Borís Yeltsin, en una distendida entrevista en la cadena de televisión NTV. "Yo con el presidente no tengo problemas", dijo Lébed, cuando le preguntaron qué haría si Yeltsin, que le destituyó como secretario del Consejo de Seguridad en octubre de 1996, le invitara a colaborar con él.La favorable entrevista, emitida en una jornada festiva (el día internacional de la mujer) y anunciada ampliamente la víspera, parece indicar un cambio en la política informativa del influyente canal televisivo, que Yeltsin adjudicó por decreto al grupo financiero MOST tras las elecciones presidenciales.

Tanto MOST como Lébed contribuyeron sustancialmente a la victoria del presidente. El general, el tercer clasificado en la primera vuelta, exhortó después a votar por Yeltsin y obtuvo a cambio un cargo oficial, donde se mantuvo unos meses.

Por primera vez desde su cese, Lébed fue el protagonista de un amplio programa dedicado a la vida privada de los famosos. En "el héroe del día sin corbata" Lébed besó tiernamente a su esposa Ina y conversó sin acritud sobre asuntos cotidianos. El general se avino a hacer flexiones en el suelo, a pedalear en la bicicleta fija, a enseñar las fotos de cuando tenía cinco años, las de su boda con la única mujer con la que baila, y también las de sus hijos y sus nietos. Orgullosamente, Lébed agitó ante la cámara la foto en la que da la mano al presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, en la ceremonia de toma de posesión de éste. Dijo que no bebe desde 1993 como reacción al excesivo hábito de algunos cargos políticos y militares y que "no soporta" las cacerías.

Vladímir Gusinski, el jefe del grupo de comunicación MOST, ha reiterado recientemente la animadversión que le inspira la figura de Lébed, por lo que el trato favorable dado al general por el canal NTV, muy próximo al gabinete presidencial, puede responder tanto a un mayor profesionalismo informativo como a la necesidad de recuperarse del daño causado a la imagen de NTV por una de sus figuras estrellas, Evgueni Kisiliov, que ha utilizado el insulto personal contra sus oponentes.

Aspirante a la sucesión

Como demostró Yeltsin en el pasado, el boicoteo informativo puede tener consecuencias opuestas a las esperadas por quienes lo practican. Un tratamiento normal de la figura del general puede rebajar su carisma y convertirlo en "uno más" entre los aspirantes a suceder a Yeltsin. NTV ha criticado al hermano del general, Aléxei, gobernador de la república siberiana de Jakasia. A Aléxei Lébed se le acusa de mantener un estilo autoritario y de complicidades con las fábricas de aluminio locales. Varios medios de comunicación rusos han enviado a sus equipos a Jakasia a investigar posibles relaciones de Aléxei, militar como su hermano, con la "guerra del aluminio". Esta guerra entre grupos económicos rusos e internacionales ha sido uno de los grandes temas de Evgueni Kisiliov en la NTV, que ha implicado en ella al ex vicejefe del Gobierno, Alexandr Soskovets, y al ex guardaespaldas jefe de Yeltsin, Alexandr Korzhakov. Estos facilitaron supuestamente la penetración en el mercado ruso de la empresa británica Trans World Metals y de los hermanos Cherni, ex ciudadanos soviéticos emigrados a Israel. La empresa británica ha acusado a los bancos rusos y sus aliados gubernamentales de intentar reprivatizar la industria del aluminio a costa de los inversores extranjeros.