Los populares temen que CiU use a ERC para radicalizar la ley lingüística

El debate sobre la ley lingüística subió ayer de tono al advertir Alberto, Fernández Díaz, presidente del PP de Cataluña, a CiU que "no utilice a los independentistas para hacer el trabajo sucio" con vistas a la negociación de la futura ley. Fernández-Díaz expresó su temor de que CiU pretenda beneficiarse de los planteamientos radicales de Esquerra Republicana (ERC) y el Partido Independentista "para aparecer como fuerza moderadora". ERC ya ha insinuado que esta ley puede implicar retrocesos respecto a la situación actual y que su partido no será "acólito de una pantomima". Fernández-Díaz afirmó que su partido no se sumará "a falsas unanimidades" que desvirtúen lo! planteamientos de su formación y fue rotundo al afirmar que no apoyará "una ley con piel de cordero que imponga cuotas, que encubra sanciones por la vía indirecta o que pretenda el intervencionismo en las relaciones entre ciudadanos en la esfera privada".

El dirigente del PP catalán precisó que "la Administración está obligada a dirigirse siempre en catalán y en castellano" y afirmó que CiU y el PSC no pueden oponerse a ello "ya que cuando llegan las campañas electorales editan su propaganda electoral en catalán y en castellano".