Sanidad impide haya farmacias en Ias estaciones, pero no en Barajas
Los usuarios del tren no tienen la misma consideración para la Consejería de Sanidad que los del avión. Ha denegado la apertura de farmacias en las estaciones con el argumento de que "no tienen población residente". Pero Sanidad no tuvo en cuenta estos hechos cuando concedió licencia para dos boticas en el aeropuerto, donde tampoco hay población. "Es que en los aeropuertos hay muchos retrasos", justifican.
La Consejería de Sanidad manifestó ayer que la denegación de farmacias -efectuada el pasado día 3 en las estaciones- se hace por "razones de bienestar ciudadano". Y lo explicó: "Los aeropuertos están alejados de las ciudades unos kilómetros y las tripulaciones pueden necesitar medicaciones. Además, los pasajeros suelen permanecer muchas horas en los aeropuertos. En cambio, en las estaciones los viajeros pasan poco tiempo".Esta opinión choca con el informe del Tribunal de Defensa de la Competencia sobre las farmacias, de junio de 1995, que señala: Hay que suprimir "los obstáculos que impiden la apertura de farmacias en aquellos lugares en los que el tránsito de ciudadanos es relevante (aeropuertos, estaciones. y centros comerciales)".
La Asociación de Farmacéuticos en Paro señala: "Los parados presentan solicitudes para las estaciones, ya que existe una sentencia del Tribunal Supremo que reconoce este derecho en los aeropuertos. Pero la Comunidad las deniega. ¿Por qué?", preguntan.
Población residente
En los expedientes que deniegan las boticas en las estaciones de Parla y Móstoles, Sanidad argumenta: "No existen datos contrastables sobre la existencia de población residente [en la estación] o que pernocte en la misma, no pudiendo ser computables los viajeros que transiten". Añade que dos sentencias del Supremo lo avalan.La actual legislación exige un mínimo de 2.000 habitantes para poder abrir una botica en un núcleo aislado: una estación, por ejemplo.
"Es decir", replican los parados, "que un viajero que vaya de Madrid a Barcelona, en un vuelo de una hora tiene derecho a contar con una farmacia en cada aeropuerto. Pero uno que vaya en tren y cuyo viaje dure siete horas no tiene derecho a nada. Eso le pasa por no poder pagarse un billete de avión".
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