Presuntos criminales de guerra serbios luchan del lado de Mobutu en Zaire
Cada mañana, desde el aeropuerto de Kisangani, una ciudad que se descompone a ojos vistas en el corazón de Zaire, aviones yugoslavos con pilotos ucranios despegan ruidosamente rumbo al Este, hacia una inmensa y cambiante zona de guerra, bombardeando cualquier cosa que se mueva en la impenetrable jungla a sus pies. Entre el mare mágnum humano que guerrea en Kisangani destacan los serbios, algunos de ellos presuntos criminales de guerra.
, En tierra, en el aeropuerto, un grupo de serbios con tatuajes en la piel y las cabezas rapadas entrena a una unidad de élite zaireña, enseñándoles a desmontar y limpiar las recién ensambladas ametralladoras y lanzagranadas que Serbia ha suministrado a Zaire en abierto desafío al embargo internacional de armas que pesa sobre este país africano.Los rebeldes zaireños, con el apoyo de las vecinas Ruanda y Uganda, han puesto sus ojos en Kisangani, la tercera ciudad de Zaire, como próximo objetivo estratégico. En un intento de frenar el avance rebelde, las fuerzas gubernamentales zaireñas, poco dispuestas al combate, han distribuido a diestro y siniestro rifles de asalto y cargas de mortero a los refugiados hutus ruandeses.
Algunos de estos hutus ruandeses son miembros de las milicias que organizaron las matanzas de la minoría tutsi de su país en 1994. Otros son antiguos soldados del Ejército ruandés, derrotado por las fuerzas lideradas por los tutsis y que ahora están en el poder en Ruanda.
Los hutus ruandeses y unos pocos cientos de mercenarios reclutados a toda prisa de un puñado de países europeos y africanos forman la espina dorsal de las fuerzas gubernamentales de Zaire en lo que es, sin duda alguna, una de las guerras menos convencionales de África.
"Aquí hay un poco de todo", asegura un miembro de una agencia internacional de cooperación: "Hutus que han participado en el genocidio, serbios que probablemente sean criminales de guerra y, del otro lado, tutsis que tratan ahora de desencadenar el genocidio de los otros". Según fuentes independientes, los tutsis, mayoritarios entre los rebeldes zaireños, han cazado a jóvenes hutus mientras avanzan inexorablemente a través de Zaire.
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