Cuatro heridos tras bombardear Israel bases de Hezbolá en Líbano

Israel utilizó ayer una doble vía para enviar un mensaje claro a Siria. El primer ministro Benjamín Netanyahu afirmó que la paz es imposible si Damasco no ata las manos a la guerrilla proiraní de Hezbolá, que hostiga a Israel desde territorio controlado por Siria en Líbano. Para subrayar la idea, el Ejército israelí lanzó cuatro ataques aéreos contra Hezbolá y un grupo palestino, dejando cuatro heridos. Netanyahu viaja hoy a Washington con la intención de sacar provecho político de los avances del proceso de paz en Oriente Próximo.

, Poco después del mediodía, la Fuerza Aérea israelí bombardeó cuatro veces con misiles aire-tierra el territorio de Líbano bajo control sirio, desde donde opera la guerrilla de Hezbolá en apoyo de los palestinos. La acción destruyó una emisora de radio de los rebeldes y dejó cuatro heridos.La acción sigue a otra similar el domingo pasado que tampoco dejó víctimas mortales. Poco antes de los ataques de ayer, Netanyahu, de visita en una base militar cerca de la frontera con Líbano, había advertido a este país que mientras no cese su apoyo a las guerillas palestinas resulta ocioso hablar de paz. "Está claro", dijo el primer ministro israelí, "que para que puedan avanzar las negociaciones entre Israel y Siria debe haber una acción clara y decidida [por parte de Damasco] para reducir el terror aquí".

Israel también comenzó ayer a liberar a las 31 mujeres palestinas presas en sus cárceles. Sin embargo, el proceso quedó paralizado por un recurso presentado ante el Tribunal Superior de Justicia de Israel por una organización de extrema derecha. Finalmente, la corte autorizó la puesta en libertad de todas las presas, al considerar que se trataba de una decisión política en la que no tenía nada que decir.

La liberación de las presas y el reciente acuerdo con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yasir Arafat, sobre Hebrón son las dos credenciales que Netanyahu exhibirá sin duda en Washington, donde mañana se reunirá con Bill Clinton.

"Hebrón ensombreció los encuentros precedentes con los estadounidenses", asegura un alto oficial israelí. "Ahora, Netanyahu puede ir a Washington y decir: 'Vean, cumplí mi palabra".

Por otra parte, un tribunal de Tel Aviv acordó procesar a Margalit Har-Shefi, amiga de Yigal Amir, el asesino del primer ministro Isaac Rabin, acusada de no haber impedido un hecho criminal y de suministrar los medios para el delito. El fiscal pide cinco años de prisión.