Abadlá Bucaram, de populista a antipático
El populista Abdalá Bucaram, 45 años, que se dice socialdemócrata, fue investido presidente el pasado 10 de agosto con un programa de perfil demagógico: prometió defender a los pobres contra los. ricos, hacerles cavar zanjas a los oligarcas y construir 300.000 viviendas en un plazo imposible. Era de esperar, además, que su comportamiento político y personal resultara antipático. El ajuste se aplicó sin miramientos con alzas de precios de hasta el 1.000%- y su lenguaje desde la presidencia fue provocador. "Idiotas", "estúpidos", "maricas", fueron algunos de los calificativos dirigidos a la oposición.Bucaram es abogado, está casado, tiene cuatro hijos y su família es de origen libanés. Su amigo personal y ministro de Energía hasta el viernes, Alfredo Adouni, reconoce que Bucaram es conflictivo, pero lo atribuye a que ése es el espacio que le han dejado en los medios de comunicación. "Si no provoca el conflicto no lo van a sacar en la prensa".
