Los vecinos pidieron a Fomento en 1995 que revisara el muro desplomado en la M-30

Los vecinos de la calle de Fuentemilanos, junto a la M-30 a la altura de Puerta de Hierro, denunciaron ante el Ministerio de Fomento, en 1995, en dos cartas, el deterioro del muro que separa sus viviendas de la autovía. Dicha pared se desplomó el pasado día 23 y empujó a las pantallas sónicas situadas a esa altura de la vía, que, a su vez, aplastaron el vehículo de Marco Antonio Arévalo, de 42 anos, quien falleció en el acto. Un portavoz del ministerio declaró ayer que %as cartas se están buscando en los archivos de la Dirección de Carreteras"."Se están produciendo alteraciones en los muros y solicitamos que tomen medidas para evitar desgracias materiales y personales", advertían a los responsables del ministerio los vecinos en sus escritos, remitidos por correo certificado en junio y julio de 1995. Al respecto, el portavoz del ministerio declaró: "Dos ingenieros investigan el derrumbamiento".

Fomento ha argumentado en todo momento que el muro que se desplomó sobre las pantallas acústicas provocando la caída de éstas no es responsabilidad suya, sino de la comunidad de vecinos. Las mamparas antirruido estaban preparadas para soportar la acción del viento, pero no pudieron aguantar el empuje de toneladas de piedras y barro. El efecto dominó provocó la tragedia.

"Las obras de la M-30 y la M-40 dejaron las pantallas sin soporte y advertimos sobre el riesgo de derrumbamiento en su momento", aseguró ayer José Beato, abogado vecinal. "Fomento no contestó a los escritos ni pasó a revisar los muros", añadió. Los vecinos afectados se han personado en las diligencias abiertas de oficio en los juzgados de la plaza de Castilla.