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Vicente Rojo expone sus "obras privadas"

El Reina Sofía muestra 94 trabajos sobre papel del pintor mexicano

El pintor mexicano de origen español Vicente Rojo (Barcelona, 1932) ha reunido en el Museo Nacional Reina Sofía, de Madrid, 94 obras "privadas y familiares" sobre papel. El trabajo gráfico se presentó el año pasado en la Casa de la Moneda, y en marzo se exhibirán sus diseños gráficos en el Círculo de Bellas Artes. "Sigo abriendo posibles caminos, síntesis de propuestas visuales que buscan enriquecer formas geométricas sencillas y comunes", declaró ayer el artista durante la presentación de su muestra, que en abril se colgará en la Tecla Sala, de L'Hospitalet, Barcelona.

La comisaria de la exposición, Paloma Esteban, ha dispuesto en la tercera planta del Museo Nacional Reina Sofía la obra sobre papel de Vicente Rojo de forma cronológica, desde los años sesenta, en diferentes series, hasta confluir en el mural de siete metros Gran escenario primitivo, que se presentó el año pasado en una antológica en México. "Lo pinté en mes y medio... más 40 años".Rojo, nacionalizado mexicano en 1949, declaró ayer que ha sido 17 años español y 50 mexicano. "Aunque es una proporción contundente, los años españoles, que incluyen la guerra civil y diez de posguerra, siguen siendo muy importantes. Mi vida plena la he desarrollado en México, donde culturalmente llegué bajo cero". El artista va a presentar en España todo su trabajo sobre papel, con los grabados que ya exhibió en la Casa de la Moneda y el diseño gráfico que a partir del 13 de marzo se distribuirá en el Círculo de Bellas Artes. Desde 1950 se incorpora a la industria editorial de México, donde interviene en revistas como Artes de México, suplementos de periódicos y revistas y portadas de libros.

Bajo la lluvia

El pintor encontró ayer sorpresas al ver reunidas "obras privadas, que no se ven con frecuencia", desde 1960 a 1996, y "una buena relación" entre los formatos pequeños y el mural "que resume mi trabajo". En el montaje aparecen desde la serie Laberintos a la última de Escenarios, con algunas piezas de las conocidas Señales, Negaciones y México bajo la lluvia. "La obra sobre papel tiene la ventaja de que se puede romper y es más espontánea, mientras que en la pintura sigo trabajando hasta que logro lo que quiero".Vicente Rojo declara que no busca reconocimiento, ya que le interesa sobre todo la primera etapa de pensar y hacer la pintura. "La segunda parte de exhibición tiene que defenderse sola, como los hijos".

Paloma Esteban destaca en su trabajo la unidad de la obra, aunque ofrezca diferentes facetas, y "la gran dualidad que siempre enriquece al fundir un mundo frío, el de la abstracción geométrica, con otro mundo de extremado lirismo y emotividad". El pintor dice que trabaja "balanceando razón y corazón, que es una constante de los artistas" y que todavía no ha resuelto. "Trato de enriquecer formas geométricas puras. Todos estamos rodeados de círculos, triángulos y cuadrados; son como figuras humanas".

El color es otra identificación de la obra de Vicente Rojo. Ayer recordó cómo utilizó una gama reducida de azules, rojos, grises y negros "por falta de dinero" cuando decidió pasar el año 1964 en Barcelona "para limpiarme de todo lo anterior y dibujar y pintar lo que se me ocurriera, para buscar caminos". Estos años ocupan el principio de la exposición. "En esa época horrible, de franquismo bastante duro y censura fuerte en las librerías, en el exterior seguía siendo doloroso, pero funcionó la búsqueda de aislamiento. La gama de colores se fue enriqueciendo".

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