¿Vivan las cadenas?

El Tribunal de Defensa de la Competencia da luz verde para la instalación de 40 nuevos hipermercados en la nación; dice que todavía estamos muy alejados de tales instalaciones comparativamente con los países de nuestro entorno. Debiera España tener idénticas posibilidades económicas con que cubrir necesidades y demandas de las que carece, y que el presidente de este tribunal conoce sobradamente, para así equiparamos en todo.Las pymes no tienen miedo al guno de lo que representa la competencia libre y leal de los establecimientos híper que hayan de instalarse. Las pymes tienen miedo de la permisividad hacia la competencia desleal que políticamente se les permite a esas organizaciones financieras de enorme poder de persuasión; del desigual trato que padecen quienes ostentan el poder en cualquier momento.

Esperamos indiferentes al año 2001, con el que llegará la total libertad de horarios de apertura comercial. Quienes deben tener desasosiego son los políticos y gobernantes de turno cuando la estadística de la existencia de pymes sea notablemente exigua y sume al paro más paro, y sume al poder económico de quienes hoy lo os tentan más poder. Puede que esta economía especuladora marque una política inconveniente para los intereses españoles.

Los comerciantes pequeños debemos, deberíamos, no tener afectos políticos determinados; cumplir con la obligación de dar o retirar la confianza, sí, pero nada más. Pero hay comerciantes pequeños, en mi actividad concreta, a los que les gusta gritar y practicar aquello de "vivan las cadenas" y sirven de fámulos a quienes dicen que representan a los empresarios, sólo a los grandes; éstos siempre han estado contra la Ley de Comercio que la Constitución exige y el buen sentido y prudencia económica del país demandan.-