Dos ex agentes sandinistas, acusados de atentar contra Alemán

Los obstáculos encontrados por el liberal Amoldo Alemán en su camino a la presidencia de Nicaragua han dejado de ser retóricos. La detención, el viernes por la noche, de dos antiguos miembros de los cuerpos de seguridad sandinista con 800 gramos de explosivos ha puesto contra las cuerdas a la antigua guerrilla, segunda fuerza política del país, y a su dirigente, el ex presidente Daniel Ortega: sus continuas proclamas belicosas contra el nuevo Gobierno han cobrado así una siniestra dimensión práctica.Uno de los detenidos, Miguel Ángel Acuña, es un ex oficial del Ejército. El otro, Néstor Moncada, subcomandante de la policía hasta 1992, tiene una trayectoria más conocida. Según fuentes policiales, Moncada participó en el asesinato, en 1980, de Jorge Salazar, dirigente de la patronal nicaragüense, y se le considera un hombre próximo a Daniel Ortega. Actualmente ejercía de asesor legal del Canal 4 de televisión, propiedad del Frente Sandinista.

Ambos hombres conducían un vehículo sin matrícula de la emisora que fue interceptado cerca de unas oficinas de Alianza Liberal, el partido de Alemán. Al registrarlo los agentes descubrieron un paquete con cuatro cartuchos de 200 gramos de explosivo cada uno. Moncada portaba además una pistola. Faltaban tan sólo unas. horas para la toma de posesión del nuevo presidente.

Montaje "dinamitero"

Los detenidos han asegurado que "todo es un móntaje". El problema es que el Frente Sandinista cuenta con un reciente capítulo dinamitero que le resta credibilidad: todavía está bien presente la oleada de atentados con explosivos que destruyeron una veintena de iglesias a finales de 1995, por los que han sido condenados 16 de sus militantes.

A ellos se han unido los llamamientos que Daniel Ortega ha lanzado contra el nuevo Gobierno, que han ido subiendo de tono hasta culminar en la consigna de "defender el Estado de derecho por cualquier vía". Precisamente horas antes de la detención de los dos sospechosos, el ministro español de Asuntos Exteriores, Abel Matutes, había advertido a Ortega, con el que se reunió en privado, del peligro de que "ese tipo de expresiones" pudieran estar amparando actos de violencia. "El Gobierno de Arnoldo Alemán ha ganado unas elecciones", aseguró Matutes. "Nuestro consejo ha sido que no se puede deslegitimar la esencia del sistema democrático y que todos deben consolidar estos avances". El presidente nicaragüense ha declarado que no va a culpar a nadie sin tener pruebas.

[El líder sandinista, Daniel Ortega, anunció ayer haber enviado una carta al presidente Alemán en la que acepta dialogar cuanto antes para buscar una solución a la crisis política del país, informa Efe. Alemán invitó el viernes a Ortega a dialogar "con altura, públicamente, sin agenda ni condiciones" para buscar soluciones conjuntas.]